Ante su inminente extradición, funcionarios de la Procuraduría General de la República, de las secretarías de Gobernación y de Relaciones Exteriores y de la Comisión Nacional de Seguridad, afirmaron que no existe posibilidad alguna de que Joaquín Guzmán Loera, “El Chapo” negocie algún acuerdo con las autoridades de los Estados Unidos para reducir la pena a la que se le condene.
Estos se reunieron con los integrantes de la Comisión Bicameral de Seguridad Nacional, a quienes les reiteraron que el cambio de “El Chapo” del penal de El Altiplano al Centro Federal de Readaptación Social Número 9 en Ciudad Juárez, Chihuahua, obedeció exclusivamente a razones de seguridad.
En esa cárcel está sujeto a los mismos protocolos de custodia que tenía en El Altiplano, es decir, vigilancia las 24 horas de forma física y electrónica, incluso con perros entrenados y con un pase de lista a distintas horas del día.
Fernando Yunes Márquez, secretario de esta comisión, declaró que los senadores y diputados les manifestaron a los representantes del Gobierno Federal su preocupación porque “El Chapo” salga libre antes de tiempo en los EU.