La novela Cien años de soledad, de Gabriel García Márquez, cumple este 30 de mayo medio siglo de su primera edición en Argentina, y tiene tantas interpretaciones como sus millones de lectores en los cinco continentes.
“Muchos años después, frente al pelotón de fusilamiento, el coronel Aureliano Buendía había de recordar aquella tarde remota en que su padre lo llevó a conocer el hielo”, así inicia García Márquez (Gabo) la creación de ese mundo mágico que es Macondo –que 50 años después– está traducido en 36 idiomas.
El Congreso de la Lengua Española, que se realizó en la ciudad de Cartagena en 2007, celebró con la presencia del Nobel de Literatura, el millón de ventas de Cien años de soledad.
Cien años de soledad tiene lectores en los sistemas de transporte masivos de todo el mundo, en los parques, en las escuelas, en los niveles sociales altos, medios y bajos, en todas las culturas y en todas las razas y es ahí es donde está la universalidad de la obra maestra que llevó a García Márquez al Nobel de Literatura en 1982.
Las tesis, los análisis sociológicos, políticos, históricos y literarios, no sólo están presentes en la academia colombiana sino en las más prestigiosas universidades de todo el mundo y es por todo este impacto que se dice que la vida y la obra de García Márquez son inmortales.
Para Carlos Fuentes “Cien años de soledad se convierte en una terrible metáfora del abandono y el miedo del hombre sobre la tierra”.