Tras retomar el diálogo de modernización del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), al cual calificó de “constructivo” y “muy positivo”, el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, afirmó que la negociación debe tomar un nuevo ritmo.
Los miembros de la delegación mexicana expresaron una visión optimista con miras a concretar un exitoso acuerdo el mes próximo.
Previo a la reunión en Washington con el representante comercial estadounidense, Robert Lighthizer, Guajardo señaló que es momento de que las discusiones tomen “una nueva velocidad”.
“Tenemos claramente el objetivo de aumentarle la velocidad a este proceso, con el fin de encontrar la pista de aterrizaje adecuada para un nuevo acuerdo”, declaró el secretario de Economía.
Calificó el encuentro de más de una hora como una oportunidad para “revisar los espacios de aproximación, ver qué es posible, dar instrucciones a nuestros equipos”.
“Fue una reunión donde intercambiamos una serie de ideas para tratar de avanzar en esta negociación, ideas de ambos lados. Fue una reunión constructiva, muy positiva”.
Mientras que Jesús Seade, representante del equipo de Andrés Manuel López Obrador, quien acompañó al secretario de Economía, fue enfático al señalar que fue una buena reunión y dijo: “Yo estoy optimista, pero optimista cauteloso”.
Más temprano, a su llegada a Washington, el secretario indicó que hay nueve capítulos ya concluidos y otros 10 tienen un gran avance.
Por su parte, Lighthizer calificó como razonable concretar el acuerdo en agosto. “(Algún tipo de conclusión en agosto), siento que no es un plazo irrazonable si todos lo quieren hacer. Esa es nuestra esperanza”, declaró al comparecer en el Senado.
Así el representante comercial americano manifestó su interés de que sea el próximo mes cuando se alcance el objetivo, justo cuando las mesas de diálogo cumplen un año.
Según sus cálculos, agosto sería el plazo último para que, de conseguirse un pacto, éste sea ratificado antes de la salida del actual mandatario mexicano, Enrique Peña Nieto.