México no cuenta con un sistema abierto de información sobre infraestructura de transporte de hidrocarburos, opacidad que permanece aun con la implementación de la Reforma Energética, denunció la Fundación Heinrich Böll.
“La ubicación de los ductos, su antigüedad, bitácoras de mantenimiento, de riesgos, fugas, accidentes, no está, hay que recurrir a Google y periódicos como fuente oficial de información, cuando lo que haría falta sería tener bitácoras de todo lo que ocurre; derrames, volúmenes, impactos, información sistematizada y proporcionada por la autoridad responsable, sin embargo de esto no hay nada”, acotó el investigador Manuel Llano.
De acuerdo con los hallazgos independientes, es la primera vez que se conoce de la existencia de 6 mil 777 proyectos de ductos en México, que constituyen 68 mil 817.05 kilómetros a lo largo de todo el territorio nacional.
Señala que con el argumento de la seguridad nacional autoridades en materia de energía e hidrocarburos niegan el acceso público a la información desagregada y en formatos abiertos sobre la infraestructura de ductos existente.
Indican que resulta difícil creer el argumento de la seguridad nacional, puesto que, al buscar documentos se encuentra con que esta información ha sido publicada numerosas veces por fuentes oficiales, aunque de manera poco sistemática y en formatos cerrados.
“Asomarse con detalle a la información sobre estos ductos no es tarea fácil, la mayor parte no sólo no está disponible de manera desagregada, ni en formatos abiertos, sino que su definición como de ‘seguridad nacional’ sirve de coartada para la negación sistemática de la misma”, detalló el especialista.
Sin estos datos es imposible detectar zonas de riesgo civil por el paso de esta infraestructura, Llano asegura que es alarmante el número de ductos que cruzan ciudades, comunidades, escuelas, hospitales y cultivos; “pero esto la gente no lo sabe, porque no hay un trazo exacto, ni se sabe si se trata de invasión de vía”.
El Centro de Información sobre Empresas y Derechos Humanos en 2016 lanzó un informe donde documenta 61 casos de conflictos asociados a temas medio ambientales, 11 están relacionados con el sector de hidrocarburos, la mayoría por quejas comunitarias contra gasoductos.
“Por ejemplo, el gasoducto Tuxpan-Tula puede afectar a 130 comunidades indígenas otomíes y nahuas en la sierra Norte de Puebla”, señaló Beatriz Olivera, de Fundar Centro de Análisis e Investigación.
Tipos y medidas
El cruce de información hecho en el análisis “Ductos ¿por dónde circulan los hidrocarburos en México?”, señala que los gasoductos, por donde se transporta gas natural o gas LP son la infraestructura más extendida en el país, con 34 mil 242 kilómetros y mil 291 proyectos en el territorio nacional.
Precisa que en segundo lugar figuran los oleogasoductos, que sacan el petróleo o gas natural de la zona de extracción con más de cuatro mil proyectos a lo largo de 11 mil kilómetros, mientras que los poliductos que conducen producto refinado, lugar común de tomas clandestinas, representan 161 proyectos a lo largo de nueve mil kilómetros.