Los teléfonos móviles se han vuelto indispensables en el acontecer diario. Tanto así, que se duerme y se come junto a ellos.
Según estudios de firmas tecnológicas la relación con los celulares es tanta que en promedio revisamos 47 veces al día, en comparación con los más jóvenes, entre 18 y 24 años, que miran las pantallas de sus dispositivos hasta 82 ocasiones diariamente.
Nos hemos vuelto dependientes de los smartphones, ya que prácticamente se puede hacer todo en ellos: nos dicen el clima, la hora del día y hasta cuántos pasos hemos dado. Nos entretienen con música y nos conectan con amigos y familiares.
Ante este uso excesivo, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) señaló que podría generar malestares en articulaciones, ojos, huesos y oídos, por lo que subrayó la necesidad de atender la recomendación de moderar su uso.
La especialista en otorrinolaringología Coral García Serrano explicó que el oído está constituido por tres puntos –externo, medio e interno– y que al escuchar música a más de 85 decibeles se pueden dañar las células receptoras y decodificadoras del sonido exterior, lo cual es irreversible.
Detalló que durante la etapa de los 12 a 40 años es cuando el oído sufre el mayor daño por exceso de ruido, de ahí que invita a evitar el abuso del celular.
“La radiofrecuencia nos puede originar un calentamiento de los tejidos y en las generaciones jóvenes se nos va a disparar este padecimiento”, añadió.
El doctor Nicolás Manilla Lezama afirmó que el uso frecuente de los teléfonos celulares y tabletas está produciendo mucho estrés en la población y trastornos del sueño.
Nicolás Manilla sentenció que los dispositivos también son “bancos de bacterias”, por el tiempo que los tenemos en las manos y por la poca limpieza que se les hace.
“Podemos ver que en las pantallas se forma una capa grasosa, esa es mugre que se va acumulando y que al estar en contacto con las personas origina otros padecimientos virales”, advirtió.
El especialista del IMSS dijo que al generar textos o estar pendiente de las aplicaciones en los equipos móviles se flexiona la cabeza de manera prolongada e inadecuada, lo anterior produce mucho dolor en la parte alta y media de la espalda, así como en el cuello, incluso aparece la enfermedad conocida como neuralgia occipital.
De acuerdo con los expertos del Instituto Mexicano del Seguro Social, que los dedos se tengan que mover a una gran velocidad en una sola postura para redactar un texto produce inflamación de los tendones y el síndrome del túnel carpiano.
Manilla Lezama recordó que han detectado en los derechohabientes cansancio visual porque cada vez las pantallas son más grandes y luminosas, muestra de ello es que los ojos empiezan a apuntar hacia otra dirección lo que origina cambios en el enfoque y daño en la agudeza visual.