El sector salud advirtió que en los periodos de otoño e invierno, los problemas respiratorios ocupan el primer lugar como causa de atención en los servicios, en la demanda de servicios médicos tanto de niños como de adultos. Sin embargo, la mayoría son alergias.
El especialista del Centro Quirúrgico Juárez del Centro, Raúl Dorbeker Azcona, aseguró que durante la época de frío, explicó, es común que se confundan los síntomas de enfermedades respiratorias con las alérgicas causadas especialmente por el pelo o caspa de perros y gatos.
Entre los animales domésticos, señaló, los felinos son los que más causan alergia entre la población por la caspa que sueltan, la cual se inhala con facilidad y penetra con rapidez al organismo humano.
También la presencia de cucarachas en la casa favorece el desarrollo de alergias entre la población susceptible, pues al morirse el cuerpo del insecto se pulveriza y ese polvo tiene proteínas que son altamente alergénicas y pueden desarrollar rinitis o asma.
Dorbeker Azcona expuso que las alergias son como bola de nieve, si no se tratan el problema avanza. Puede iniciar con una rinitis y terminar con cuadros de asma.
En entrevista, explicó que el paciente alérgico que utiliza tratamientos de venta libre contra la gripa, sentirá una mejoría pasajera, pero va a recaer al estar expuesto a los factores que provocan los malestares.
Por ello, quienes presenten escurrimiento nasal, estornudos, picazón en los ojos o que la tos persista por más de tres semanas, deben acudir cuanto antes con su médico para recibir el tratamiento adecuado.
A diferencia de las enfermedades respiratorias, la alergia no va a desencadenar malestar general como cuerpo cortado, dolor de cabeza o fiebre, debido a que es un problema multifactorial, que tiene componente genético, es decir, si un padre la padece, sus hijos tienen más riesgo de desarrollarla.
El especialista indicó que cuando se presentan estos síntomas se recomienda realizar pruebas cutáneas para determinar a qué es alérgica la persona. Con el tratamiento se reducen los síntomas y en los pacientes asmáticos mejora la función respiratoria.
Se trata de una reacción exagerada del organismo hacia algún agente ambiental, como polen, contaminación, pelo de perro o gato y ácaros del polvo, principalmente.