Más que un atractivo para disfrutar en el verano, el Santuario de las Luciérnagas, en el bosque de Nanacamilpa, Tlaxcala, es una riqueza natural para preservar.
Durante junio, julio y agosto se presenta la temporada de avistamiento en la zona boscosa de Nanacamilpa –o Tierra de Hongos–, donde los capitalinos, por la cercanía a la Ciudad de México, y visitantes de otros lugares, podrán disfrutar de estas luces vivientes.
Cada año, estos coleópteros (que en realidad son escarabajos) visitan los municipios tlaxcaltecas de Nanacamilpa y Españita para reproducirse, gracias a que esta área de más de 200 hectáreas de pinos, cedros y oyameles ofrece las condiciones ideales de humedad y alimentación para sus larvas.
Una vez que se arriba a la zona donde se encuentran los bichos luminosos se podrá admirar a las hembras iluminarse para atraer a los machos y fertilizar sus huevos, mismos que depositan en la tierra.
La postal que brinda la bioluminiscencia es, simplemente, increíble.
Este fenómeno se presenta cuando las luciérnagas producen carbono e hidrógeno en la parte baja de su abdomen, elementos que al entrar en un proceso de oxidación, logran generar la luz.
Para observar este fenómeno tan frágil es necesario contratar los servicios de guía que ofrecen los 24 centros ecoturísticos y de avistamiento autorizados. Las caminatas son de tres horas en medio del bosque y en absoluto silencio para no irrumpir durante el ritual de apareamiento de los insectos.
Pocos bosques en el mundo ofrecen un espectáculo como éste, pues se deben reunir las condiciones ideales de humedad, altura, tipo de vegetación y lluvia.
Para el cuidado y protección de esta especie y con la finalidad de preservar su hábitat, la Secretaría de Turismo del Estado (Secture) recomendó a los turistas llevar ropa oscura, abrigadora, impermeable y sin reflejantes.
Además, sugirió evitar el uso de repelente para insectos y no llevar aparatos que emitan luz o sonido, y para evitar afectaciones al medio ambiente, exhortó a no llevar mascotas, no consumir alimentos o bebidas alcohólicas, tampoco fumar o encender fogatas y no tirar basura.
La dependencia estatal precisó que los autobuses, vehículos, motocicletas o cuatrimotos deberán permanecer fuera de la zona de avistamiento.
El ingreso de los paseantes es a partir de las 19:30 horas y la permanencia será hasta las 23:00 horas para no interferir con el proceso de reproducción de los insectos.