A las 19:00 horas comenzó en el estadio BBVA, en Monterrey, la gran final de la Liga MX; en la que el América se logró coronar como tricampeón, luego de vencer a los Rayados por un marcador global de 3 a 1.
Cabe señalar que desde el primer momento del juego, el Monterrey tuvo un difícil planteamiento ya que en el primer juego, de ida en el estadio Cuauhtémoc, perdió por dos goles a uno; de modo que requería de un gol para mandar el juego a tiempos extras o de anotar dos para ganar.
Sin embargo, el América desde un inicio no sólo tuvo la idea de juego más clara, sino que incluso las llegadas más mortíferas, de las cuales cayó una como un auténtico bote de agua helada para todo el estadio BBVA al minuto 24′.
Luego de un centro largo a las afueras del área grande, Fidalgo re centró con la cabeza para dejar la bola muerta del izquierdo; desde ahí Richard Sánchez sacó un auténtico escopetazo imposible de detener para Andrada.
Cabe señalar que el Monterrey intentó cerrar el primer tiempo con una anotación que lo acercara, sin embargo, las pocas opciones de gol que tuvo no lograron su cometido, salvo una atajada de Malagón.
El segundo tiempo estuvo marcado por la ausencia del Monterrey. A pesar de los cambios, el equipo nunca se encontró por más que Canales intentó posicionar en ventaja a los regios. Su fútbol fue tan nulo que tuvo pocas llegadas al arco.
El América, por su cuenta, comenzó a canchear desde el inicio del segundo tiempo y hasta el minuto 84′, en el que Rojas metió un gol de un fierrazo desde casi afuera del área grande. El estadio estalló al caer la anotación.
A pesar de los esfuerzos del Monterrey, el gol que los llevaría al alargue no cayó; de modo que perdieron por un marcador global de 2 a 3.