En el marco del Día Internacional de las Personas con Discapacidad y con la intención de darle visibilidad a las mujeres mexiquenses, se desarrolló el Panel de Mujeres en el Deporte, donde hablaron sobre los grandes retos que han afrontado.
Es de referir, que el Gobierno del Estado de México abre estos espacios donde grandes mujeres mexiquenses puedan inspirar y ser ejemplo para la población de la entidad, destacando cómo es que a través de la práctica deportiva puede existir una inclusión a la sociedad para las personas que viven con discapacidad.
Máximo Quintana Haddad, director General de Cultura Física y Deporte, declaró que es importante visibilizar a las mujeres con discapacidad que practican un deporte y de las mujeres en general; pero sobre todo, invitó a los asistentes a la reflexión acerca de este tema tan importante para la sociedad.
En la charla participaron la medallista paralímpica de Tokio 2020 en lanzamiento de bala, en la clasificación F54, Gloria Zarza Guadarrama; la paratenimesista, Claudia Pérez Villalba; además de la madre de la medallista paralímpica Daniela Velasco, la señora Margarita Maldonado, y completado el panel se presentó Sandra Edith Mata, servidora pública de la Subsecretaría de Turismo, quienes compartieron sus experiencias.
La primera en tomar la palabra fue Zarza Guadarrama quien señaló que ella adquirió su discapacidad desde una temprana edad, quedando con secuelas de poliomielitis, lo que fue determinante en su vida cotidiana.
Aunado a esto, compartió que no cursó el preescolar e ingresó a la primaria “ya grande”, donde vivió experiencias que marcaron su vida, como el quedarse en el salón de clase cuando el resto de sus compañeros salían a tomar educación física.
“En la clase de educación física me tenía que quedar en el aula porque me decían que yo no podía hacer deporte, que no podía incluirme en esa actividad, ahora si supieran mis profesores que soy medallista paralímpica y que el deporte ha cambiado mi vida, se preguntarían dónde está esa niña que dejaban en el aula; siempre fui una mujer aguerrida”, aseveró.
Por su parte, Claudia Pérez detalló como ella adquirió su discapacidad a una edad adulta, lo que fue un parteaguas en su vida que al principio la sumió en una depresión que la llevó a pesar 150 kilógramos, pero que, con terapia psicológica, y sobre todo el deporte, logró salir adelante y convertirse en una atleta de alto rendimiento que ya participó en unos Juegos Paralímpicos.
Asimismo, Margarita Maldonado explicó cómo fue descubrir que su hija de tres meses tenía cáncer en un ojo y estaba comprometido el otro, por lo que fue sometida a diversas operaciones que la hicieron perder la visibilidad, y a la edad de un año, ya dada de alta, se enfrentó a criar a una hija con discapacidad, con lo que tuvo que lidiar con todo un sistema para brindarle las oportunidades para desarrollarse, hasta llegar al deporte de alto rendimiento.
“Nos dedicamos entre mi esposo, su hermana y la familia que es más cercana, a apoyarla, a que aprendiera todas las cosas que ella quisiera, esa es la obligación de los papás, y enseñarle que aún con todas las dificultades, y cuantas veces tuviera que repetir las cosas, si las iba a poder hacer, adaptadas; con todo lo que implica tener una discapacidad”, afirmó.
Sandra Mata compartió como luego de un accidente automovilístico adquirió su discapacidad y tras una temporada de adaptación de más de cuatro años llegó la aceptación de su condición en busca de una vida plena.
Esta charla es un espacio de inspiración para el público, pues las reflexiones finales fueron que no existen límites y que la vida es una constante oportunidad para salir adelante e ir por los sueños.