BOGOTÁ (AP) — La FIFA y la CONMEBOL condenaron el miércoles los presuntos casos de acoso sexual y laboral en el seno de la selección femenina Sub17 de Colombia.
Dos jugadoras y una fisioterapeuta denunciaron haber sido víctimas de acoso durante las concentraciones previas al Mundial de Uruguay, disputado en noviembre de 2018, y acusaron de comportamientos inapropiados al entrenador del equipo, Didier Luna, así como al preparador físico, Sigifredo Alonso.
La Federación Colombiana de Fútbol (FCF) pidió a la Fiscalía General investigar y esclarecer las denuncias. La Fiscalía anunció el lunes que Luna deberá comparecer, acompañado de su abogado, el 22 de abril para que un juez de garantías le notifique formalmente de los cargos.
“La FIFA y la Conmebol condenan enérgicamente cualquier tipo de acoso sexual o laboral, violencia de género y/o violación de los derechos de la mujer o la niñez, y, en respuesta a la solicitud de la FCF, ofrecen todo su apoyo y la experiencia de sus órganos competentes a la Federación en materia de capacidad preventiva y, si fuera necesario, sancionadora”, destacó el pronunciamiento de las entidades rectoras.
Las vigorosas voces de reprobación han ido en aumento en los últimos días. Después de un comunicado emitido por la FCF, los integrantes de la selección mayor masculina, con James Rodríguez y Radamel Falcao a la cabeza, difundieron su propio pronunciamiento en el que manifestaron ser solidarios con sus compañeras de la selección femenina.
Luna ha sido acusado por Carolina Rozo, quien se desempeñó como fisioterapeuta de la selección. Rozo denunció que el ex entrenador la acosó a ella y a algunas integrantes del equipo. Rozo también señaló al preparador físico Sigifredo Alonso por presunto acoso sexual a las futbolistas.
“La FIFA, la Conmebol y la FCF revisarán las medidas de protección de la federación, a petición propia y como prioridad clave. La FIFA, la Conmebol y sus federaciones miembro tienen el compromiso de proteger y garantizar la seguridad de los niños en el fútbol”, señalaron.
Isabella Echeverri y Melissa Ortiz, integrantes del plantel femenino de mayores de Colombia, antes de la denuncias de la fisioterapeuta afirmaron en un vídeo en las redes sociales que la federación supuestamente las discriminaba e incluso que se sentían amenazadas con la posibilidad de perder sus puestos en el combinado por manifestar su descontento.
“La FIFA tiene el firme compromiso de respetar los derechos humanos reconocidos por la comunidad internacional y se esforzará por garantizar el respeto de estos derechos”, concluyó el comunicado.
