El astro lució inquieto durante su comparecencia ante la corte donde enfrenta cargos por evasión fiscal, los cuales podrían llevarlo a la carcel
Lionel Messi negó el jueves tener conocimiento alguno de los asuntos tributarios que le produjeron una acusación de evasión fiscal, y afirmó que firmaba documentos sin leerlos porque confiaba en las gestiones de su padre y de los asesores contratados para manejar sus finanzas.
“Me dedicaba a jugar al fútbol”, declaró el astro del Barcelona y de la selección argentina al declarar en el juicio en contra suya y de su padre, Jorge Horacio Messi. “No sé nada de eso, nunca me interesé, sinceramente”.
Vestido con un traje oscuro y corbata, Messi se sentó al lado de su padre frente al juez y escuchó otros testimonios durante casi dos horas, antes de ser llamado al banquillo de los testigos durante el tercer día del juicio.
Messi habló por menos de 15 minutos, y aseguró que nunca sospechó de irregularidades cuando su padre le pedía que firmara contratos o documentos.
“Firmé porque confío en mi papá. No sé nada de eso. Nunca me interesé, sinceramente, por eso”, agregó el delantero.
Indicó que los abogados “lo controlaban todo. Mi papá se había encargado de que fueran los abogados que llevaran las cosas. Para eso están”.
El futbolista lució inquieto en la corte, con la cabeza gacha y estirando las piernas. Por ratos martillaba el piso con el pie izquierdo, el mismo que lo ha convertido en el mejor jugador y le ha generado decenas de millones de dólares.
Messi y su padre encaran tres cargos de evasión fiscal y podrían ser condenados a casi dos años de prisión, si son declarados culpables por defraudar a la Hacienda española con 4,1 millones de euros (4,5 millones de dólares) entre 2007 y 2009.