No llores por mí, Argentina

Por Manuel Cuéllar
La vida de Argentina en el Mundial de Rusia tiene sus últimos latidos, luego de que la Albiceleste de Lionel Messi fue goleada y humillada en su segundo compromiso en este torneo ante Croacia, quien los venció 3-0 en la cancha del estadio Nizhni Nóvgorod.
Las distracciones y los errores infantiles de la zaga sudamericana fueron sus verdugos, los cuales fueron bien aprovechados por la ofensiva croata pero hasta el segundo tiempo.
Durante la primera parte el marcador estuvo en ceros, Argentina mostraba signos de querer revivir en este torneo, y aunque las opciones de gol fueron mínimas el esfuerzo por llegar a la portería contraría se vieron, pero la visión goleadora de Messi y compañía no estaba tan ‘afinada’ como en ocasiones anteriores.
Para la segunda mitad la lluvia de goles de Croacia y la tragedia de la Albiceleste comenzó. Primero fue un error de su guardameta Willy Caballero, quien al 53′ intentó despejar una pelota sólo la dejó ‘dormida’ en el aire, la cual Ante Rebic aprovechó para fusilar de volea al cancerbero rival para el 1-0.
Desde entonces el juego se dividió y se pudo ver más equilibrado, pero el espíritu de una Argentina aguerrida y con un buen futbol, jamás lució y al 80 la ‘sentencia de eliminación’ llegó.
La especialidad de Luka Modric, los disparos a larga distancia, salieron a relucir, y con un ‘cañonazo’ desde fuera del área puso el 2-0 en la pizarra, ya en el complemento, una jugada de contragolpe agarró mal planteados a los sudamericanos en la cancha, y tras una serie de toques que desequilibraron a los defensores, Ivan Rakitic sentenció el encuentro 3-0.
Mientras la alegría de Croacia no se escondió debido a que con este resultado clasificó a los Octavos de Final, Argentina ‘llora’, ya que tiene un pie de regreso a su país, pues su clasificación depende de un milagro y una combinación de resultados en los próximos juegos.

NO TE VAYAS SIN LEER: