No es un secreto que la comida rápida es perjudicial para la salud, o que sus insumos provienen de calidades inferiores, es por eso que una vez más la organización The Humane League denuncia el maltrato animal, sobretodo ejercido por la compañía internacional que más vende hamburguesas en el mundo.
Desde octubre del año pasado el organismo ha presionado a McDonald’s para que deje de comprar pollos de crecimiento acelerado, los cuales son alimentados en jaulas hasta que no pueden pararse en sus patas.
The Humane League ha trabajado en conjunto con otras cadenas restauranteras como Subway, Burger King, entre otras para poder erradicar esta práctica por parte de sus proveedores para el año 2024, pero la empresa de Ronald McDonald no ha sido determinante para hacer esta transición.
“La campaña de The Humane League exige que la transición de McDonald’s a pollos de mayor bienestar sea aprobada por la Real Sociedad para la Prevención de la Crueldad contra los Animales (RSPCA en inglés) o por la Asociación Global de Animales(GAP en inglés) (..) Otras empresas de comida rápida, proveedores de servicios de alimentos, empresas de bienes de consumo envasados e incluso los productores se han comprometido a hacer la transición a variedades de aves con mejores resultados de bienestar aceptado para su uso por RSPCA o GAP”, pronuncia el comunicado de los activistas.
Actualmente esta concientización se propaga de manera viral en redes sociales con el hashtag #imnotlovinit, invitando a los usuarios a firmar la petición en la página web imnotlovinit.com e incluso enviar un correo electrónico a los ejecutivos de McDonald’s.
Para quienes tengan interés, en el portal se muestran imágenes de cómo los pollos son tratados y manipulados para crecer de manera rápida, perdiendo su movilidad y esto les afecta a su salud.