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Deporta EU a 22 mil migrantes de El Salvador y Honduras

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La inmigración centroamericana a la Unión Americana se incrementó, mientras que la mexicana disminuyó.


Unos 22 mil migrantes de Honduras y El Salvador fueron deportados de Estados Unidos a sus países desde al inicio del año fiscal, en octubre pasado, a la fecha, informó el secretario de Seguridad Nacional, Jeh Johnson; además aseguró que las autoridades migratorias estadounidenses envían alrededor de 12 vuelos semanales a Honduras y El Salvador con migrantes que recibieron órdenes de deportación.

El funcionario federal emitió un comunicado para comentar su viaje de dos días, este jueves y viernes, a Honduras y El Salvador, donde se reunió con los presidentes y otros funcionarios de los dos países centroamericanos.

El funcionario estadounidense expresó estar “impresionado con los esfuerzos que ambos gobiernos hacen para repatriar, reinstalar y reintegrar a sus ciudadanos deportados a domicilio por nuestro país”.

Indicó que “mi mensaje en ambos países fue que nuestras fronteras no están abiertos a la migración irregular o ilegal”.

“Debemos hacer cumplir las leyes de inmigración de EU consistentes en nuestras principios de control, y continuaremos con ello”, señaló Johnson.

El secretario de Seguridad Nacional reiteró que la migración irregular desde Centroamérica a EU representa una aventura peligrosa e indicó que, al igual que los gobiernos de El Salvador y Honduras, Estados Unidos pondrá en relieve los peligros de la migración ilegal o irregular hacia este país.

Johnson advirtió que se empeña en combatir a las organizaciones criminales de contrabando para evitar una mayor explotación de los migrantes, y recordó que en los últimos dos años y medio se realizaron más de seis mil detenciones de contrabandistas criminales.

El funcionario señaló que EU ofrece una alternativa segura y una ruta a quienes deseen emigrar mediante el “Programa de Menores de América Central”.

La medida recibió más de siete mil solicitudes, y más de mil 100 ya fueron aprobadas para solicitantes en El Salvador, Honduras y Guatemala. Johnson previó que se aumentarán el número de individuos capaces de aprobar de cara al programa, y para ampliar aún más el procesamiento de refugiados en general para la misma zona geográfica.