Un ex militar croata convicto de crímenes de guerra se suicidó este miércoles al ingerir veneno poco después de que un juez del tribunal internacional ratificó su sentencia a 20 años de cárcel por su participación en atrocidades durante la guerra en Bosnia.
Slobodan Praljak gritó “¡no soy criminal de guerra, me opongo a esta condena!” y bebió de un frasco durante la audiencia en el Tribunal Internacional para Crímenes de Guerra en la Antigua Yugoslavia, una entidad adscrita a la ONU.
Praljak fue acusado de participar en la campaña por expulsar a musulmanes de un territorio que aspiraba a ser un miniestado bosnio-croata dentro de Bosnia a comienzos de la década de 1990.
El portavoz del tribunal Nenad Golcevski, confirmó que el general murió en un hospital poco después de beber el líquido.
El tribunal fue acordonado y el juez Carmel Agius lo declaró “escena de crimen” mientras la policía holandesa investigaba.
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Praljak, de 72 años, estaba detenido por guardias del tribunal en las horas previas a la audiencia y no queda claro cómo pudo haber accedido al veneno y cómo pudo haberlo introducido en la sala fuertemente custodiada.
El juez había derogado algunas de las sentencias contra Praljak pero ratificó otras, y dejó inalterada su sentencia. Praljak, de pie mientras escuchaba al juez, sacó un frasco, echó atrás la cabeza e ingerió el contenido.
Con información de Reporte Índigo