El juez federal de la Corte Este de Nueva York, Brian Cogan, rechazó hoy que se hayan relajado las condiciones de detención y transporte del narcotraficante mexicano Joaquín “El Chapo” Guzmán por sus antecedentes.
De 59 años de edad, Guzmán fue presentado este viernes por segunda ocasión en la corte de Brooklyn luego de que fuera extraditado a Estados Unidos el pasado 19 de enero; en el sitio tuvo la oportunidad de cruzar miradas con su esposa Emma Coronel, para su mala fortuna tuvo que hacerlo de lejos y sin tener contacto entre ambos.
“Ustedes vieron lo que yo mire, escucharon lo que yo escuché y no hay nada más que argumentar”, declaró Coronel a la salida de la corte.
Guzmán, quien fue descrito por la fiscalía de Brooklyn como “el más notorio criminal en la historia moderna”, enfrenta 17 cargos relacionados con sus presuntas actividades criminales durante más de tres décadas.
Cogan rechazó ordenar al Centro Correccional Metropolitano, ubicado en Manhattan, que cambiara las condiciones de encierro, o que el Cuerpo de Alguaciles de Estados Unidos alterara las medidas que emplean durante el transporte de Guzmá a la corte.
El juez consideró que las medidas son “razonables bajo las circunstancias” a juzgar por el historial de Guzmán, que en un par de ocasiones logró fugarse de prisiones de alta seguridad en México.
En la audiencia preliminar del caso, los dos defensores públicos de Guzmán se quejaron de que a Guzmán no se le permitan hacer llamadas telefónicas para dialogar con sus abogados de México ni recibir visitas de su esposa.
También denunciaron que las condiciones de visita son tan restrictivas que los cinco individuos que por el momento tienen acceso a la celda de Guzmán, todos de la oficina de la defensa, no pueden siquiera tomar agua cuando visitan al acusado.
“Esas medidas afectan nuestra capacidad de representar a Guzmán”, indicó Michelle Gelernt, una de las abogadas de Guzmán.
Gelernt expresó que la defensa comprende las medidas excepcionales de seguridad, que implican que el “El Chapo” sea mantenido aislado en una celda durante 23 horas al día, con una sola hora de ejercicio, aunque consideraron que eran excesivas.
En la audiencia preliminar, los abogados expresaron que las acusaciones contenidas en los documentos sobre los que se basó la extradición no coinciden necesariamente con los 17 cargos presentados contra Guzmán en la corte del distrito este de Nueva York.
Durante el juicio, además, los abogados se quejaron de que no habían obtenido los documentos en los que se basó la extradición para determinar si el proceso se realizó conforme a derecho.
“Nos preocupa la legalidad de la extradición”, explicó Gelernt en declaraciones a los medios de comunicación tras la audiencia.
El juez Cogan dispuso que la fiscalía entregue los documentos a la defensa, además de permitir que dos personas adicionales del equipo de abogados de Guzmán pudieran obtener acceso a la celda del acusado.
El juez fijó la siguiente audiencia para el próximo 5 de mayo, en un plazo de 90 días, lapso que servirá para determinar si Guzmán continúa con los abogados de oficio que ahora lo representan o escoge una defensa privada.
Guzmán, quien se declaró inocente de los 17 cargos que se le imputaron en Brooklyn, podría enfrentar una condena de cadena perpetua si se le encuentra culpable.
La fiscalía asegura que Guzmán es culpable de orquestar un esquema de transporte y distribución de cientos de toneladas de drogas a Estados Unidos.