Ante la preocupación de cuidar más el ambiente y al mismo tiempo, ganarse unos pesos a cambio de deshacerse de aquello que estorba en casa, el mercado del reciclaje está creciendo en la actualidad, principalmente para jóvenes emprendedores que encuentran en la apertura de chatarrerías o depósitos de ecofibras, una fuente de oportunidades de negocios.
En entrevista para CAPITALMEDIA, Berenice Cuevas Díaz, colaboradora del depósito de ecofibras “Ponderosa” ubicado en Toluca, indicó que si bien el reciclaje no es una industria joven, se nota un resurgimiento de los establecimientos dedicados a ello, donde los jóvenes aprovechan el alto potencial de la compra de materiales al público y luego venderlos a grandes centros.
De manera general dijo, las ventas representan una ganancia del doble de lo invertido al comprar los artículos a las personas, quienes suelen llevar en promedio 30 kilos de material.
“Las personas nos traen los materiales que ya no usan y sobre todo, que han tenido almacenados por mucho tiempo en sus casas, aunque también algunos de los clientes se dedican a juntarlos con sus vecinos para que el viaje valga la pena”.
Entre los materiales que más se compran, destacan el PET, cartón y papel, aunque también se adquiere aluminio y escasamente, el vidrio.
Comentó que el papel y cartón se compran a un precio de un peso con cincuenta centavos el kilo, el periódico a dos pesos y el PET a tres, mientras que el aluminio es lo que les representa mayor costo, pues lo pagan a 18 pesos.
Explicó que, por lo menos en la ciudad de Toluca, los negocios dedicados a esto para reciclaje suelen tener una adquisición de una tonelada diaria, pero no significa que lleguen al local, pues la estrategia implementada es salir a conseguir el material con camionetas que recorren las calles, voceando.
Berenice Cuevas agregó que gran parte del negocio depende de las oficinas de gobierno y los peridicos, que optan por ofertar principalmente todo el papel que generan en los trámites que realizan al día, así como las ediciones que no fueron vendidas.
“Cuando vienen de las oficinas cercanas de gobierno, nos traen entre 50 y 100 kilos de papel principalmente, y también los periódicos nos llegan a vender hasta los 500 kilos”, aseguró.
Más allá de lo que puedan llegar a recibir, dijo, las personas están comenzando a tener una cultura del reciclaje, pues ya no tiran esos materiales a la basura, sino que lo van juntado por semana, mientras que las empresas dedicadas al reciclaje como tal, ya trabajan con depósitos y ellas mismas acuden por todo lo recolectado.
El reciclaje, un negocio rentable
Pet, papel, aluminio; los chatarreros van por todo lo que se pueda revender
Recientes
Lo más visto