El mayor número de accidentes por explosión de cohetones son ocasionados por la venta de estos productos elaborados de forma clandestina, los artesanos los comercializan a precios más económicos y las personas que los adquieren no tienen la mínima capacitación para su manejo y quema, consideró  Alejandro Fuentes, permisionario de San Mateo Tlalchichilpan en Almoya de Juárez.
Explicó que en este poblado, 70 por ciento de sus habitantes se dedican a la elaboración de artificios, y 90 de ellos, cuentan con los permisos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), contra 150 que lo hacen de forma irregular.
Comentó que regularmente la autoridad en la materia realiza inspecciones y capacita a los trabajadores en el manejo de sustancias, elaboración traslado y cómo detonar los productos sin accidentes. Afirmó que hay quienes venden productos a personas que no tienen capacitación para detonar los cohetones, lo que genera incidentes.
Alejandro Fuentes comentó que en la pirotecnia hay productos de primera, segunda y hasta tercera calidad, por lo que hay quienes para ganar un poco más utilizan insumos de baja calidad, que es también una causa de percances.
Recordó que una gruesa de cohetones de buena calidad cuesta mil 500 pesos, aunque hay precios más económicos, al hacer referencia sobre los accidentes, apuntó “éstos se presentan muchas veces por el mal manejo de los productos, o hacer pruebas que a la mejor las vieron o las quieren intentar y no saben el riesgo que lleva el mezclar los materiales”.
Mencionó que hay muchos jóvenes en Tlalchichilpan que trabajan de forma clandestina, pues establecen talleres en su casa y no tienen las medidas de seguridad apropiadas para elaborar los artificios, por lo que las sanciones deben ser más grandes.