Las ventas de carne de res y cerdo bajaron hasta 60 por ciento en los últimos cinco meses debido al incremento del precio del producto, la mala economía familiar, la cuaresma y el dicho de los ganaderos que refieren que no hay producción, lo que ha obligado a muchos carniceros a cerrar sus negocios, comentó Lázaro Santana Cruz, integrante de la Asociación de Tablajeros del Estado de México.
Explicó que éstos son algunos factores que se están presentando en la disminución de la venta de carne aunado a ello, también la renta de los locales afecta directamente a los tablajeros que se ven obligados a buscar trabajo en los rastros y abandonar sus establecimientos.
Señaló que ahora el precio del kilo de bistec se encuentra en 150 pesos desde diciembre; sin embargo, espera a que las ventas repunten en próximos meses, aunque el alza en el producto también obedece al incremento en la gasolinas, otro pretexto que ponen los ganaderos para no surtir o bien para subir el costo.
Mencionó que en esta cuaresma siempre baja la venta, sobre todo los viernes en que la clientela prefiere buscar alternativas para alimentarse y no adquieren el producto, situación que dijo la padecen poco más de 200 carnicerías que están afiliadas a la asociación, cuyas oficinas se cerraron por la falta de socios que ahora sólo las ocupan para actualizar las declaraciones fiscales.
Reconoció que en la ciudad de Toluca se abrieron nuevos locales, pero en las colonias hay algunos que han cerrado debido a que los ganaderos se niegan a surtir el producto por lo lejano que se encuentran y el costo del combustible, lo que obliga a buscar directamente en los rastros para ahorrarse algo de su ganancia, además la inseguridad también le pega a los tablajeros que son objeto de robos, sobre todo los que se encuentran en colonias y fraccionamientos de reciente creación y ubicados en los alrededores de la ciudad.