El incremento del 20 por ciento al salario mínimo de los trabajadores es una buena medida, sin embargo, para generar mayor bienestar en la población se necesita crear mejores condiciones de desarrollo, porque el mayor número de la población trabaja en la informalidad, señaló Gilberto Sauza Martínez, presidente del Consejo de Cámaras y Asociaciones Empresariales del Estado de México (Concaem).

La determinación presidencial en relación al salario, explicó el líder empresarial,  beneficiaría a 18.3 millones de trabajadores, pero hay poco más de 56 millones de personas en la informalidad, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).

Ante este panorama, apuntó que el incremento en el salario sí provocará un mayor flujo de efectivo, pero no necesariamente mejores condiciones de vida en el largo plazo para toda la población.

“El aumento del 20 por ciento solo beneficiará de manera directa a las personas que ganan el salario mínimo y en la industria, por ejemplo, es casi imposible encontrar una persona que gane eso. En el caso del sector servicios, el salario se complementa con bonos o comisiones por lo que el ingreso difícilmente es de un salario mínimo”, comentó.

El presidente de Concaem, señaló que aquellos que se ubican en la informalidad continuarán en condiciones de precariedad e inestabilidad, por lo que reiteró el llamado a las autoridades a impulsar políticas de largo plazo, a partir del trabajo conjunto con el sector económico, de manera que se impulsen estrategias integrales que signifiquen desarrollo y bienestar generalizados.

A decir de Sauza Martínez, lo que necesita el país es un verdadero crecimiento en la economía, ya que ello traerá mejores ventas e inversión, reducción del desempleo y de la informalidad.

Finalmente, apuntó que la política establecida en los últimos años en el salario mínimo, “no necesariamente repercute en mejorar el poder adquisitivo de toda la población ni es una medida efectiva para el control de la inflación, por lo que las acciones deben ser de mayor alcance, para impactar en la calidad de vida de las y los mexicanos”.

Fue el pasado primero de diciembre cuando el gobierno federal informó que el salario mínimo pasará de 172.87 a 207.44 pesos diarios; mientras que en la Zona Libre de la Frontera Norte pasa de 260.34 a 312.41 pesos diarios.

Asimismo, apuntó que “los salarios mínimos profesionales también recibirán un incremento de 20 por ciento”, con el fin de hacerle frente a la inflación.