“El aumento de los energéticos y la gasolina impactan 20 por ciento en el poder adquisitivo de los mexicanos”, informó en entrevista para CAPITALMEDIA, Roberto Gutiérrez Rodríguez, quien investigador en el Departamento de Economía de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) y especialista en temas energéticos.
Dijo que es válido que tortilleros, quienes los primeros en anunciar un incremento, así como productores, quieran hacerlo, porque además de que hay más mano de obra y aumentó la gasolina, sus precios se contuvieron en años pasados al llegar a acuerdos con el gobierno.
Tras el aumento en el kilogramo de tortilla y otros productos, el investigador de la UAM detalló que “los energéticos representan 16 por ciento en la estructura de consumo y las tortillas tres por ciento, el porcentaje restante son los productos que van asociados a la tortilla, por ello el aumento en las gasolinas es preponderante en el costo de los productos, ya que los energéticos son la base de la economía mexicana”.
Roberto Gutiérrez indicó que durante 2018 seguirán los aumentos en diferentes productos y servicios por tres factores: salarios mínimos, liberación de gasolinas y contención de la inflación.
Asimismo, el doctor en Economía recordó que el incremento en precios de diferentes productos se da a inicio de año porque “el salario mínimo aumenta en diciembre y se aplica el 1 de enero, como se determina en la Ley de Ingresos que aprueba el Congreso a fin de año”, Sin embargo, el espcialista en temas energéticos recalcó que en este año también se debe a la liberación de los precios de la gasolina, así como a la contención de la inflación de diferentes productos, entre ellos  la tortilla.
“El gobierno adelantó un mes la liberación de precios de las gasolinas, originalmente se había acordado que se liberalizaban el 1 de enero de 2018, pero adelantaron la liberación el 30 de noviembre del 2017… desde el momento que se adelantó la fecha había una sospecha del aumento en la gasolina”, expuso.
Además, Gutiérrez Rodríguez recordó que el precio del gas “ya estaba aumentando antes que el precio de la gasolina y sigue aumentando, llegando a  un incremento de 40 por ciento”.
El investigador enfatizó que “el gobierno debe reconsiderar su posición y reconocer que varios de los precios que están afectando a los productores vienen por la liberalización y particularmente por la aplicación de la Reforma Energética, porque en lo que en un principio se dijo que iba a reducir los precios en realidad los está aumentando”.