Una ruta conocida por muchos de ellos, o al menos de las más habituales para los centroamericanos –en otras condiciones–: la de Tultitlán hacia Ecatepec, por la vía López Portillo; o sobre la carretera México-Pachuca, para llegar a Indios Verdes, ya en la Ciudad de México, son dos alternativas distintas que tiene la llamada Caravana Migrante para arribar al Valle de México en su peregrinar con destino a la Unión Americana.
La primera de estas opciones la tomaron los migrantes hondureños, salvadoreños y guatemaltecos al iniciar la semana cuando su arribo al Valle de México lo hicieron por la autopista México-Puebla, hasta la caseta de San Marcos, en el municipio mexiquense de Chalco.
Al otro lado, los reportes indican que la caravana se dispersó en territorio ecatepense, pero sólo porque algunos grupos se rezagaron mientras descansaban, aunque a decir de las autoridades no se tiene la certeza de que los migrantes hayan dormido en este municipio del extremo norte del Valle de México.
En contraparte, la misma autoridad asegura que “en cuanto los centroamericanos son detectados, una unidad de policía los acompaña para que su paso por Ecatepec sea seguro”.
El viaje de la Caravana que ciertamente se ha segmentado todavía más en esta parte de su recorrido, lo hacen sus integrantes ya sea a pie o abordo de todo tipo de vehículos particulares, cuyos conductores les ofrecen “aventones”.
En su trayecto, la gente les sigue obsequiando comida o agua, alimentos y bebidas que los migrantes ingieren mientras descansan cada determinado número de kilómetros que consiguen avanzar.
Tan sólo en la colonia Emiliano Zapata de Ecatepec los vecinos brindaron alimentos y algo de ropa a un grupo de migrantes que no tenían tan clara la ruta hacia este municipio.
De acuerdo con Raúl, un integrante de la caravana, a él y a sus acompañantes centroamericanos los conductores que del sur de la entidad se dirigían al centro los dejaron muy cerca de Ecatepec, hasta donde llegaron caminando.
Ricardo, un hondureño en tránsito por México, agradeció “a sus hermanos mexicanos la ayuda”, luego de aclarar que su intención no es quedarse en México, pues sólo va “en transferencia hacia el sueño americano, tan pronto cruce la frontera norte en busca de una mejor vida”.
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