Más de 126 mil mexiquenses se verán afectados por las bajas temperaturas durante esta época invernal, de acuerdo a un reporte de Protección Civil del Estado de México.
Serán habitantes de 215 localidades en 30 municipios, los más susceptibles por bajas temperaturas y ante el pronóstico de 9 a 11 tormentas invernales, con mayor ocurrencia en diciembre y enero.
Los municipios de la entidad mexiquense con mayores descensos térmicos serán: Acambay, Acolman, Almoloya de Juárez, Amanalco, Amecameca, Atlacomulco, Atlautla, Ayapango, Calimaya, Chapa de Mota, Cocotitlán, Ecatzingo, El Oro, Huixquilucan, Isidro Fabela, Ixtapaluca (zona montañosa).
Además de Ixtlahuaca, Jilotepec, Jiquipilco, Jocotitlán, en este último se han reportado las primeras nevadas de este año.
Asimismo, otros municipios vulnerables serán Lerma, Metepec, Morelos, Naucalpan (zona alta), Nextlalpan, Nicolás Romero, Ocoyoacac, Otzolotepec, Ozumba, San Felipe del Progreso, San Mateo Atenco.
Así como Tianguistenco, Tecámac, Temamatla, Temascalcingo, Temoaya, Tenango del Aire, Tenango del Valle, Texcoco (zona montañosa), Timilpan, Tlalmanalco, Toluca, Villa del Carbón, Xalatlaco y Zinacantepec.
Diciembre y enero, será el periodo invernal más importante, pues se prevé la presencia de ambientes con mayor presencia de aire frío acompañados de heladas nocturnas y matutinas.
Algunas masas de aire frío tendrán la capacidad de provocar valores muy fríos de hasta -10ºC en las cimas de sierras y volcanes y un promedio de -5ºC en las zonas del norte y centro, y cercanas a 0ºC en el noreste y oriente de la entidad.
Por ello, las autoridades de Protección Civil, tienen previsto alrededor de cuatro eventos de nevadas en las cimas volcánicas.
Será en marzo a mayo, últimos meses de invierno, cuando se dé el incremento térmico de hasta 3ºC por arriba de los valores que normalmente ocurren, por lo que las temperaturas diurnas y nocturnas tenderán al alza y sólo un descenso esporádico
Por lo anterior, las autoridades pronostican un invierno normalmente frío a muy frío durante los meses más importantes del invierno, de diciembre a febrero, perdiendo intensidad rápidamente a partir de marzo.