Hay más de 1.2 millones de mexiquenses avecindados en diversos estados del vecino país, Estados Unidos, según el anuario de Migración y Remesas México 2021.
Miles de familias en el Estado de México no son la excepción, dependen de los recursos que les envían los que se fueron a buscar mejores oportunidades.
La familia Padilla, es ejemplo de ello, dependen de las remesas que envían dos de sus hijos y con el dinero que les mandan desde el vecino país del norte pueden comprar medicamentos, comida y ropa.
“El que nos llegue el envío de dinero es sencillo, nuestros hijos nos hablan por teléfono y nos dan los datos de cuánto nos mandaron”, comenta la señora Padilla.
Para recoger el dinero, explica, sólo tengo que ir al lugar donde me indican, ya sea una tienda Elektra o una tienda Aurrera o Walmart.
“Para cobrar el giro tengo que presentar una identificación, mi INE y el número de envío. Es muy rápido y sencillo cobrar el dinero”, comparte.
El señor César Padilla, puntualiza que hay que ir acompañados y tener cuidado porque hay gente que sabe, sobre todo en Elektra, que va uno a recoger dinero que nos mandan de Estados Unidos.
“Ya en una ocasión nos asaltaron”, a raíz de eso, explica, nuestros hijos nos mandan el dinero a distinto lugar.
Lo que vemos es que en los recibos de lo que nos mandan, es una foto por el teléfono, pues dependiendo de la compañía que elijan para realizar la transferencia les cobran la comisión.
Comenta que por ejemplo, si lo ponen en Walmart les cobran 5 dólares de comisión por 200 dólares.
Y si lo ponen, por “Orlando Voluta”, que lo podemos recoger en algún banco Elektra, les cobran 10 dólares por el envío de 200 a 495 dólares.
Analizando uno de los recibos, dice, pudimos ver que suponiendo que el envío es de 400 dólares y la comisión es de 10 dólares, esto se queda en Estados Unidos y no en nuestro país.
La suma total que recibe el destinatario por la remesa depende de la compañía que elijan para realizar la transferencia.
Los servicios de envío de remesas son una alternativa muy popular hoy día. El problema es la tasa de cambio que manejan. En otras palabras, te dan menos pesos mexicanos por tus dólares, apunta el señor Padilla. En cuanto a irnos a Estados Unidos con nuestros hijos, asegura, “no lo vemos como una opción, pues ya somos grandes y nos gusta nuestro país”.