Más de 50 comuneros de Tepezoyuca del municipio de Ocoyoacac, bloquearon dos de los tres carriles de la carretera Toluca-México, en demanda del respeto de 32 hectáreas que utiliza la empresa ferroviaria para la construcción del Tren suburbano, así como el pago equitativo por sus tierras, pues se quejan del pago de 300 millones de pesos que le otorgaron a sus vecinos de Acazulco, con quienes sostienen un pleito por terrenos.
El bloqueo de la vía se registró a la altura del kilómetro 37.5 con dirección a la Ciudad de México, esto luego de no llegar a un acuerdo con la autoridad municipal y representante del gobierno del estado, quienes a su decir no les resuelven sus problemas de conflicto con los ejidatarios de Acazulco.
El bloqueo generó asentamiento vial que abarcó los cuatro kilómetros de distancia, donde cientos de vehículos particulares, de pasajeros y descarga quedaron varados, por más de dos horas, hasta que los inconformes decidieron abrir, tras el compromiso de la autoridad para establecer mesas de diálogo.
Francisco Montes Juárez, representante de los inconformes explicó que sus tierras que abarcan 20 mil hectáreas les pertenecen desde tiempos ancestrales por decreto presidencial, sin embargo, al paso de los años, los habitantes de Acazulco se apropiaron de la mayor parte de terreno, aun cuando ellos, tienen la documentación de la propiedad.
Dijo que este pleito afecta directamente a 408 personas, quienes solicitan una reunión con el secretario de Comunicaciones y Transportes, para solucionar el conflicto y el pago de los daños a sus tierras por la construcción del Tren, toda vez que sus terrenos ya no serán útiles para la siembra.
Francisco Montes, dijo que exigen el pago de las 32 hectáreas, “han hecho pagos a otros grupos que no pertenecen a esta comunidad, es lo que se está reclamando”, agregó que estas tierras son bienes comunales y no entienden el porqué sólo pagaron a unos cuantos que no son ejidatarios.
Por todo ello, exigen el respeto a sus derechos y que la obra se suspenda mientras se llega a un acuerdo entre las partes en conflicto, que beneficien a los ejidatarios de Tepezoyuca.