Autoridades de Naucalpan y empresarios rechazaron que la construcción que se lleva a cabo en Ciudad Satélite generará desabasto de agua potable en la zona, ya que se contempla la instalación de una planta de tratamiento.
Luego de la protesta de habitantes, las autoridades reunieron a los ciudadanos inconformes con representantes de la empresa Fibra Uno, quien lleva a cabo el desarrollo de este proyecto.
Arturo Barrera de la Vega, representante legal de la empresa Fibra Uno, informó que el desarrollo inmobiliario consta de la construcción de dos torres de oficinas de 16 niveles, y no de 23 como se ha rumorado, además de un centro comercial y no un hospital.
“La empresa no sólo se encargará de la obra y se irá. Somos constructores y operadores del inmueble, por lo que pretendemos generar una buena vecindad”, comentó el abogado de Fibra Uno, quien estuvo acompañado del residente de Obra, Carlos Alberto Torres.
Por su parte, Sergio Mancilla Zayas, titular de la Dirección General de Gobierno de Naucalpan, explicó a los vecinos que el proyecto cuenta con los permisos estatales correspondientes y tiene una licencia de construcción vigente, la cual fue expedida en la administración anterior, encabezada por Patricia Durán Reveles.
Puntualizó que el actual gobierno de Angélica Moya Marín, trabaja para reordenar el municipio con transparencia y legalidad, por lo que siempre le abrirán las puertas a los ciudadanos para que conozcan los proyectos que están en construcción dentro de la demarcación.
Ante la preocupación de los habitantes sobre la sobre explotación de los servicios públicos que podría desencadenar la obra, así como las afectaciones a la movilidad, se dio a conocer que el proyecto contempla la rehabilitación del drenaje dentro del predio que ocupa el inmueble, a fin de dar buen cauce a las aguas residuales y pluviales.
Además, se informó que será edificada una planta de tratamiento de agua para reutilizarla en baños y riego de áreas verdes. Aclararon que actualmente en los trabajos de construcción se ocupa pipas y concreto premezclado, por lo que no se usan las tomas del predio.
Las autoridades de Naucalpan enfatizaron que se continuará privilegiando el diálogo, por lo que se llevarán a cabo mesas de concertación de manera permanente, con el fin de evitar la desinformación. Fue este pasado 17 de agosto, cuando un promedio de 50 vecinos se manifestaron en los alrededores de la obra, exigiendo su clausura.