De acuerdo con el contralor del Poder Legislativo, Victorino Barrios Dávalos, es complicado que los gobiernos sean totalmente abiertos, no porque no tengan los medios para hacerlo, sino porque no existe el valor para mostrar todo lo que se discute; sin embargo, dijo, los nuevos gobiernos locales tendrán que enfrentarse a este reto que se ha convertido ya en una exigencia ciudadana.
“Están tan acostumbrados a esconder la información y hacer acuerdos para clasificar información que muchos no quieren que se sepa cuánto ganan. Parece que no hay voluntad política ni ganas de hacerlo”, sostuvo, al reiterar que ser transparentes y abiertos les permitirá recuperar la confianza ciudadana.
Lo anterior lo indicó tras presenciar la conferencia magistral denominada “El Reto del gobierno abierto, en los gobiernos locales”, impartida por Leticia Contreras Orozco, profesora e investigadora de la Universidad Autónoma del Estado de México, donde refirió que para lograr un gobierno abierto, las nuevas autoridades deben comprometerse a crear instituciones de transparencia; entablar una constante conversación con los ciudadanos; facilitar la colaboración ciudadano-servidores públicos y convertir su información a datos abiertos para que sea accesible a todos.
Refirió que un gobierno abierto debe estar basado en tres pilares fundamentales; la transparencia, la colaboración y la participación, por lo que para lograrlo deben echar mano de un presupuesto participativo, foros abiertos, plataformas cívicas y el uso de plataformas tecnológicas para que los recursos sean destinados a las verdaderas demandas ciudadanas.
Aunado a lo anterior, comentó que entre los retos que existen para los interesados en ser un gobierno abierto son el tener recursos limitados que les impiden realizar algunas de sus propuestas, el acceso limitado de la tecnología, así como acabar de tajo con la tradición político-administrativa en donde las decisiones se toman en el escritorio y a puerta cerrada.