Javier Vargas Zempoaltecatl, secretario de la Contraloría del gobierno del Estado de México, indicó que para el próximo año, la dependencia a su cargo buscará un incremento de presupuesto, o bien, al menos mantener los 390 millones de pesos aproximadamente con los que trabaja este 2019, los cuales dijo, estarán enfocados a la consolidación del Sistema Anticorrupción de la entidad.
Comentó que a lo largo del presente año ya se han tenido importantes avances en la materia; sin embargo, existen pendientes que gracias a la inversión del presupuesto del 2020, podrán concluir, especialmente en temas de organización e infraestructura.
Precisó que a la fecha, la Secretaría de la Contraloría cuenta ya con 78 órganos internos de control; sin embargo, no todos tienen la estructura idónea, pues conforme al nuevo marco jurídico AntiCorrupción, éstos deben tener un área de auditoría, una de investigación, y una de responsabilidades administrativas, por lo que un tema pendiente es el fortalecimiento de dichos organismos.
Otra prioridad dijo, será continuar con la capacitación y profesionalización del personal de la Secretaría, buscando alcanzar el mayor número de certificaciones en los procesos del sistema de gestión de la calidad, aquellos sustantivos de control y evaluación, de responsabilidades administrativas, el laboratorio de análisis de materiales de la construcción; la parte administrativa referente a recursos humanos, así como materiales.
Por otra parte, el funcionario recalcó que este año además de atender el tema del Sistema Anticorrupción, la Secretaría de la Contraloría se abocó a sentar las bases para el Sistema Antisoborno, con lo cual destacó, la dependencia será la primera a nivel nacional en contar con dicha certificación.
En este sentido, explicó que durante este mes de septiembre, se comenzó a poner en marcha la certificación en sus procesos bajo la norma ISO 9001/2019, lo cual es la base para la implementación de la norma Antisoborno; en octubre dijo, se someterá a la auditoría interna, en noviembre será la externa por parte de un ente certificador y se espera que en diciembre, se reciba el certificado.
Comentó que estas acciones, vienen a reforzar el trabajo en materia de carácter preventivo, de integridad y ética en el servicio público, a efecto de identificar en los procesos, las áreas de riesgo y que pudieran ser factibles para un acto de corrupción, agregando que las áreas en las dependencias de atención, control y evaluación, de investigación, y de procedimientos administrativos han sido las más susceptibles.