Considerando que cada vez son más las personas que tienen acceso a redes sociales, abriendo la posibilidad para difundir, publicar y replicar discursos de discriminación y odio en contra de candidatas a puestos de elección, causando daños a su integridad, dignidad o seguridad, el Instituto Electoral del Estado de México (IEEM) ha avalado una Guía para la identificación y atención de la violencia política contra las mujeres en razón de género, a través de las tecnologías de la información y comunicación.
La guía aprobada en sesión extraordinaria del IEEM, se dijo, contiene definiciones sobre los diferentes tipos de violencia, las personas que pueden cometerla, las vías para denunciarla y cada paso que debe seguirse durante la tramitación de los procedimientos correspondientes, así como las herramientas para reportar contenidos inapropiados en redes sociales.
El uso de las redes sociales para la difusión de la oferta electoral a la ciudadanía, indicó la consejera electoral Paula Melgarejo Salgado, deja la posibilidad de la denostación a través de varias acciones que puede redundar en violencia política, por lo que es pertinente y necesaria esta guía que proporciona información oportuna a candidatas y partidos políticos sobre la prevención y atención de este tipo de violencia en el uso de las redes sociales.
En tanto, la consejera Karina Ivonne Vaquera Montoya, comentó que de acuerdo con el Informe Digital Global 2022, hay 4 millones 620 mil usuarios de redes en el mundo que equivale al 58% de la población total, siendo Facebook, YouTube, TikTok y WhatsApp las redes más utilizadas y en donde se genera también alto grado de violencia contra las mujeres en razón de género.
Y es que dijo, las redes suelen menospreciar los saberes de las candidatas, su conocimiento o capacidades por ser mujeres, hacen alusiones a su cuerpo, a su sexualidad e incluso al supuesto cumplimiento o incumplimiento de los roles de género, entre ellos, indicó que el reto es informar que el lenguaje discriminatorio y el discurso de odio en redes sociales no se encuentran amparados por la libertad de expresión.
“La ciudadanía debe ser un freno que impida la proliferación de mensajes de odio e ideas misóginas que constituyen violencia política en razón de género en contra de cualquier mujer que participe en procesos electorales. Esta guía nos permite ver que también se debe mejorar la atención a las víctimas que son sujetas a ataques de personas que pueden ser identificadas, pero que en la mayoría se escudan en el anonimato que les proporciona las redes sociales y pueden cometer actos de violencia impunemente”, comentó.
