Más que de leyes, el problema del Sistema Penal Acusatorio es por la falta de capacitación de los policías, y en especial de los Ministerios Públicos, afirmó el abogado penalista y catedrático universitario, Arturo García Macías.
Recalcó que el problema no está en lo que dictan las leyes en cuanto al nuevo Sistema Penal Acusatorio.
El problema es que falta mucha capacitación para que los policías, mandos policiacos agentes ministeriales y en especial de los Ministerios Públicos, conozcan el nuevo sistema y lo sepan aplicar correctamente.
Señaló que en un alto porcentaje de las investigaciones iniciales y las averiguaciones previas contienen errores, al estar mal integradas, en algunos casos se debe al desconocimiento de las leyes y en otros por errores que ocurrieron durante las detenciones.
Y eso propicia, agregó el penalista, que los presuntos delincuentes salgan libres, y que ni siquiera lleguen a la primera audiencia para ser juzgados.
Por ejemplo, explicó que cuando se sucita la persecución de un presunto delincuente, ya no hay flagrancia, y entonces esto debería en cambiar la integración de la averiguación previa, lo que no se hace, y por añadidura el presunto delincuente sale en libertad.
También existen muchos casos en los que él o los presuntos delincuentes tienen alguna lesión, pero que casi nunca se les pasa con el médico legista, por lo que al llegar al penal, el juez de Control deja en libertad a los implicados en el delito.
El abogado y catedrático universitario señaló que el Código Penal sí debe modificarse para disminuir las penas o diferenciarlas cuando hay robo con violencia, pues no debe ser lo mismo cuando se asalta con una pistola de juguete que con un arma larga, por ejemplo.
Con estas adecuaciones se podría recurrir más a las formas anticipadas del proceso penal que permiten llegar a acuerdos para reparar el daño.
Y considera el abogado Arturo García Macías que debe haber una mayor severidad en los castigos, en los años de cárcel para delitos graves como asesinatos, violaciones, secuestros y delincuencia organizada, entre otros.