Inseguridad, casas vacías, carencia de agua y de transporte público son las principales características de la Ciudad Bicentenario creada  en Zumpango, aseguraron sus pobladores.
Al menos, 100 casas de diferentes fraccionamientos se encuentran deshabitadas y en obra negra, debido a que fueron saqueadas por los delincuentes.
“Una persona se dedicaba a desvalijar las casas, dicen que ya fue detenida, no sabemos con exactitud, pero por el miedo algunos abandonaron las viviendas, dígame usted, si no haría lo mismo”, comentó Jaime “N”, habitante de uno de los fraccionamientos de la Ciudad Bicentenario.
Al igual que Jaime, el señor Jorge García expuso que “las casas deshabitadas se han convertido en un foco rojo de inseguridad, cualquier vándalo puede ingresar debido a que ya no tienen puertas ni ventanas”.
Desde afuera de las viviendas se puede ver que en su interior ya no existen las puertas de los cuartos que la componían, ni el lavamanos del baño, “la dejaron totalmente en obra negra y ya nadie se ha hecho responsable de ellas, ni los dueños, y se entiende el por qué, a poco usted regresaría”, comentó la señora Mónica “N”.
Al igual  que la inseguridad, el problema del transporte es un padecimiento más de los lugareños, quienes para ir a Naucalpan, Cuautitlán o Tlalnepantla tienen que tomar dos camiones, mientras que para llegar a la  Ciudad de México en ocasiones deben tomar tres, por lo que “venirse a vivir acá sale más caro”, enfatizaron los pobladores entrevistados.
Actualmente, son miles de familias quienes las habitan con miedo, las cuales se han organizado para proteger su patrimonio y evitar que los delincuentes se apropien de más viviendas.