Garantizar que los alimentos para consumo humano sean inocuos, nutritivos y saludades es una de las prioridades de la gobernadora Delfina Gómez Álvarez, por lo que a través de la Secretaría del Campo se invierten 13 millones 950 mil de pesos para los proyectos de inocuidad pecuaria, agrícola y acuícola, así como el uso de sistemas de reducción de riesgos de contaminación, buen uso y manejo de plaguicidas.
De acuerdo con la Dirección General de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria de la Secretaría del Campo, se han certificado 380 unidades de producción mediante el uso de manuales y cumplimiento de las normativas del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria, organismo descentralizado de SADER, que tiene un reconocimiento internacional, regula y norma la sanidad e inocuidad en el país.
Entre dichas unidades de producción son 80 de agrícolas con vegetales como: chile manzano, pepino, aguacate, champiñón, fresa chile morrón principalmente; 260 de miel en el pecuario; y 40 de trucha en el acuícola.
Con estas medidas los productores son más competitivos en los mercados nacionales e internacionales, con mejores ingresos económicos.
Cuidar la inocuidad de los alimentos corresponde a todos los involucrados en la cadena productiva:
- Los productores deben implementar los manuales autorizados.
- Los intermediarios deben continuar con el buen manejo de los productos certificados.
- Las tiendas grandes y pequeñas deben promover o difundir los productos certificados.
- Al Gobierno le toca fomentar y destinar recursos para los proyectos de inocuidad y regular para reconocer o certificar su implementación.
En el marco del Día Mundial de la Inocuidad Alimentaria, instaurado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación (FAO), es importante recordar que esto significa producción de alimentos sanos que no causen daño a la salud humana.