Los tiraderos clandestinos en Naucalpan, se han convertido en una problemática delictiva y medioambiental; las autoridades han detectado cerca de 30 tiraderos que reciben de manera ilegal cascajo y otros materiales de construcción. 

En enero del 2022, la actual administración encabezada por Angélica Moya Marín, comenzó el combate para erradicar estos terrenos que no cuentan con las medidas necesarias para gestionar los desechos.

A la fecha, de acuerdo a un reporte proporcionado por el gobierno municipal, trabajadores de la Dirección General de Medio Ambiente, han llevado a cabo nueve operativos en coordinación con autoridades estatales, donde han sido recibidos con disparos de armas de fuego, por parte de las personas que operan los lugares. 

Al menos, ocho vertederos a cielo abierto lograron ser clausurados, es decir, sólo el 20 por ciento del total que se estima existen. 

Derivado de estas acciones, algunos servidores públicos han sido amenazados de muerte, destacaron las autoridades. 

Recientemente, el gobierno de Naucalpan envió una solicitud a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), pues un tiradero localizado en el kilómetro 8.5 de la carretera Naucalpan-Toluca afectó un río de carácter federal, pero hasta el momento no han obtenido respuesta. 

Las autoridades, indicaron que continuarán con el combate a los tiraderos clandestinos, ya que desde administraciones pasadas la problemática fue ignorada, lo que originó su crecimiento y un incremento en la inseguridad de las regiones donde se localizan.

Cabe destacar que los desechos que reciben estos lugares provienen de municipios como Atizapán de Zaragoza, Tlalnepantla y Naucalpan, así como de la Ciudad de México, entre otras localidades.

Ante este panorama, el legislador Isaac Montoya, lamentó que la operación de estos espacios continúe, principalmente en la Avenida Cipreses, de acuerdo a las denuncias ciudadanas. 

Esto, apuntó, a pesar de que en la Legislatura del Congreso Mexiquense se aprobó la iniciativa que facultó a la Secretaría del Medio Ambiente en el combate de estos sitios y otorgó corresponsabilidad a los 125 ayuntamientos, para coadyuvar con autoridades federales y estatales.

Apuntó que la afectación de estos espacios recae en los bosques, las aguas y el aire, de ahí su importancia para erradicarlos.