Información de Guillermo Espinosa
Originaria de Jilotepec, Estado de México, Ana Lilia Cruz Salinas, es la responsable del diseño para articular políticas públicas que permitan el desarrollo del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec.
Ana Lilia Cruz, al concluir la carrera, estudió una maestría en “Política y gestión de la innovación”, en el Instituto Politécnico Nacional (IPN), y desde hace varios años labora en el Gobierno Federal; inició en la Secretaría de Agricultura, en la coordinación general de asesores durante la Administración Federal 2012-2018.
En su carrera profesional, Cruz Salinas, se ha dedicado a impulsar el desarrollo regional, y fue al inicio del presente Gobierno, cuando la invitan a colaborar en las zonas económicas especiales, para diseñar las políticas públicas que impulsen el desarrollo del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec, donde uno de los elementos claves era el desarrollar una serie de proyectos de infraestructura.
“Me invitaron a participar en la gestión para el diseño del corredor. Desde 2018 ya iniciaban los trabajos de análisis de la región y un mecanismo de desarrollo estratégico, para continuar con un diagnóstico más detallado y profundo, realizando consultas en zonas indígenas, para la definición de un Plan Regional”, cuenta.
De hecho, este plan regional es el único en este gobierno federal y fue publicado en el 2020, por lo que el entramado del plan de desarrollo tardó cerca de dos años en cristalizarse.
Ana Lilia Cruz precisa que la Semar encabeza el proyecto del corredor interoceánico, y lo que se hace es generar y coordinar infraestructura en conjunto con políticas públicas para impulsar la Región del Istmo y al Sur-Sureste del país.
“La Secretaría de Marina es nuestra cabeza de sector y va dirigiendo hacia dónde debe ir tanto la institución del Corredor Interoceánico y el implemento de acciones”, puntualiza.
La mexiquense destaca que en la primera fase se desarrolló la planeación y el diálogo con las comunidades.
Con sectores
“En mi caso en particular es trabajar con el sector agroalimentario, es sentarse con la gente, conocer cuáles con sus necesidades, aspiraciones y sus limitaciones, para llevar a cabo su labor; es una parte muy delicada porque al final del día, la política pública tiene que suceder, para resolver las problemáticas reales de las comunidades”, detalla.
Posteriormente continúo la fase de implementación, que va de la mano con infraestructuras, con acciones de políticas públicas.
Explica: “Lo que hacemos es coordinar las acciones enfocadas al sector agroalimentario, para darle prioridad a la región, con programas como sembrando vida y otros más con los programas estatales de la entidad y se trabaja en otros niveles como la atención para el Bienestar”.
La parte más ambiciosa del proyecto es lograr una sinergia con las comunidades para que se involucren en el desarrollo del Corredor del istmo.
“Se deben informar los avances del proyecto y fortalecer sus habilidades productivas, de organización, comercialización, y que las comunidades aprendan a aprovechar las oportunidades que se van a generar, ya que, al haber mayor demanda de alimentos, la gente debe tener la capacidad de producirlos, la gente debe conocer las necesidades hay en el mercado para que lo puedan desarrollar”, añade.
Para la especialista en políticas públicas, el hecho de que el “Tren Interoceánico” ya esté en operaciones y traslade a personas de la región desde Salina Cruz, Oaxaca a Coatzacoalcos, Veracruz y viceversa, ya sean turistas nacionales y extranjeros todas esas personas necesitarán más alimentos y las comunidades deben aprender a producirlos para satisfacer esas demandas.
“Otra vertiente es también fortalecer las actividades productivas que ya existen y donde son líderes, la región es principalmente exportadora de piña, mango, limón, y producen gran cantidad de ganado en pie, y con la plataforma logística podrán llegar en menor tiempo sus productos, y abastecer mejor a los mercados”, comenta.
“Lo que nos toca a nosotros es fortalecer todo el contexto productivo, para que pueda incrementarse la capacidad exportadora, y eso llega a las familias de menores ingresos si los acompañamos a que tengan la capacidad para que sus productos puedan integrarse a la cadena productiva”.
Finalmente, Ana Lilia Cruz señala que la actividad que lleva a cabo es muy importante, y le da satisfacción el enfoque de cadenas productivas.