El Estado de México incrementó su superficie forestal en más de 180 mil hectáreas en 23 años, de las cuales 50 mil fueron restablecidas en los últimos cinco años.

El titular de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), Guillermo Haro Bélchez, destacó la importancia de la entrega de recursos a los Comités de Vigilancia Participativa, por con ello “se tuvieron importantes resultados como el incremento de dos a cuatro hectáreas, el arribo de la mariposa monarca, y la disminución de 19 hectáreas a menos de 12 hectáreas deforestadas en el núcleo de esta gran reserva”.

El funcionario subrayó que tan solo este año aumentó la presencia y vigilancia de los citados comités, lo que se tradujo en la realización de 21 operativos forestales.

Asimismo, casi 150 recorridos de vigilancia, 40 visitas de inspección a los aserraderos y madererías, y se instalaron filtros para la transportación de materias primas forestales.

Además, reconoció la importante participación de la Comisión General de la Policía Federal, la cual sumó esfuerzos en el cuidado de estas zonas mediante la Gendarmería Nacional, con la que se llevaron a cabo dos operativos en municipios de Michoacán y del Estado de México.

Adelantó que se incrementará esta tarea con la Gendarmería para cuidar las 108 zonas críticas forestales de las cuales 10 tendrán una especial atención, para lograr el compromiso de una deforestación “cero” al año 2030.

Finalmente, comentó que la reforestación de esta zona se duplicó respecto al año pasado y celebró que nunca como antes se dé una participación integral entre autoridades federales, estatales, municipales y la misma comunidad.