El Estado de derecho es un modelo de  gobernanza, un principio rector que vincula a autoridades y ciudadanos mediante el establecimiento de derechos, obligaciones y límites para que las personas puedan vivir en armonía, acceder a mejores oportunidades, participar en las decisiones de  sus comunidades y disfrutar de una vida y un patrimonio seguros. Es un modelo para mantener la democracia y la paz.
Sin embargo, al menos en nuestro país, ese precepto parece no aplicar en la práctica, pues ninguno de los 32 estados de la República cuenta con los estándares mínimos para ello, según refleja el estudio Índice de Estado de Derecho México 2018, desarrollado por la organización internacional World Justice Project (WJP).
El  Estado de México, Puebla, Quintana Roo, Guerrero, Baja California y Sonora, resultaron entre las entidades peor evaluadas.
El WJP aplicó una  calificación del 0 al 1 a los 32 estados de la República, de los cuales ni uno solo logró superar los 0.5 puntos.
De acuerdo al estudio, la corrupción, la inseguridad y violencia,  así como la falta de límites al poder gubernamental y sanciones por sus malas acciones,  son los principales factores que debilitan la existencia del Estado de Derecho en el país.
La puntuación más alta de los estados evaluados  es de 0.45, lo cual implica que todos los estados tienen retos importantes por delante, señala el estudio.
De las  32 entidades, Guerrero fue la peor calificada con apenas 0.29 puntos, seguida de Baja California Sur con 0.35 puntos, y Estado de México, Puebla, Quintana Roo y Sonora con 0.36 puntos.
Yucatán,  en contraste, fue el estado mejor calificado por el Índice, con 0.45 puntos.