Con información de Rubén Arizmendi

El Pleno del Senado de la República aprobó exhortar al Consejo de la Judicatura del Poder Judicial del Estado de México, “la inmediata destitución” del juez Manuel Alejandro Martínez Vitela por su “incompetencia, falta de capacidad e ineptitud”, al poner en riesgo la vida, la dignidad, la integridad y la salud de una niña de sólo cuatro años.

Casi al final de la sesión ordinaria de este miércoles, la presidenta del Senado, Ana Lilia Rivera, propuso al Pleno votar porque ese exhorto se considere de pronta resolución.

Todos los legisladores presentes de inmediato alzaron la mano, no sin antes mostrar su coraje por la decisión arbitraria del juez en el Estado de México.

Es por ello que consideraron que la resolución permita sentar precedente para evitar que miles de pederastas sigan viviendo en la impunidad por este tipo de decisiones “absurdas, denigrantes, ultrajantes y humillantes”.

Además, en el documento aprobado también exhorta al Poder Judicial del Estado de México a “condenar y aplicar justicia y reparación de daños por la cobarde y absurda decisión del juez Manuel Alejandro Martínez vitela”.

En un tercer punto, las y los senadores exhortan a la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas la inmediata reparación del daño ocasionado a la víctima.

En entrevista previa, la senadora y ministra en retiro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Olga Sánchez Cordero, se refirió al caso de la niña que fue abusada por un familiar y un juez lo dejó libre.

Dijo que los jueces siempre deben debe privilegiar el interés superior del menor y la perspectiva de infancia y de género, al resaltar que hay dictámenes psicológicos de gente sumamente especializada para poder dar indicios de pruebas sobre una presunta violencia sexual contra una niña.

Recordó que cuando estuvo en la SCJN tuvieron un caso similar de un pequeño de Oaxaca. La Corte atrajo el caso para elaborar un protocolo para estudiar el caso que requiere pruebas periciales específicas, por lo que sugirió que el caso de esa niña podría elaborarse desde ese protocolo para hacer investigaciones de este tipo de abusos, violación o tocamientos de menores de edad.

Apuntó que está la instancia de apelación y los tribunales de alzada, pero los juzgadores deben ser sensibles al interés superior del menor y de género.