“Es muy triste recorrer las calles y ver las casas colapsadas de las zonas marginadas del Estado de México.
“Hay sitios que son de difícil acceso para apoyarlos y las personas se acercan suplicando ayuda humanitaria, de materiales para la construcción y valuaciones de sus predios”, así lo expresó Israel González, integrante de la organización Servicios de Emergencia y Rescate A.C.
Señaló que en dos días de recorrido por las comunidades de Tenancingo, Ocuilan y Joquicingo, la situación es deprimente ya que los damnificados al observarlo le piden revisar sus viviendas y esperan que su opinión les permita habitar sus casas, que en muchos casos presentan daños estructurales.
Israel González, dijo que en estas comunidades repartieron alimentos, cobijas, palas, picos y medicamentos.
Recordó que el pasado 19 de septiembre, tras el sismo de 7.1 grados, miles de personas, sin la herramienta adecuada, se dieron a la tarea de remover escombros para tratar de salvar alguna persona atrapada, y se logró el rescate de nueve personas vivas en los distintos edificios, colapsados.
Destacó que los mexicanos mostraron una vez más su solidaridad con los damnificados, incluso dijo que la gente trabajó durante varias horas sin importó el cansancio, de igual forma pasó en el Edomex, donde si bien no hay grandes edificaciones también la población ayudó a los que perdieron todo su patrimonio.