Vecinos afectados por obras del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM), han presentado ante diversas dependencias, tan sólo en el último año, 65 denuncias penales por delitos relacionados con la destrucción del medio ambiente y la ecología, “la explotación irregular de material en más de 150 minas y por daños en bienes derivados de la construcción de la nueva terminal aérea”.
Así lo informó el diputado federal, Rafael Hernández Soriano, en Ecatepec, al término de una marcha por falta de agua en el municipio, quien señaló que algunas de las instancias en las que se han iniciado tales denuncias son la Procuraduría General de la República (PGR), la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM), la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente y la Procuraduría de Protección al Ambiente del Estado de México (Propaem).
El también presidente de la comisión de seguimiento de edificación de la terminal aérea en la Cámara de Diputados federal dijo que este órgano legislativo ha presentado por su parte las denuncias penales por la presunta comisión de delitos como los ya mencionados, en las mismas dependencias señaladas.
De acuerdo con el legislador, en cada recorrido por las zonas afectadas por el NAICM “la comisión ha documentado 65 denuncias, entre las que se encuentran el depósito de lodo tóxico en socavones de las minas de poblados como Tequesquináhuac, San Luis Huexotla y Tlaminca en Texcoco.
“Hablamos de más de cuatro millones de metros cúbicos de materiales de este tipo que contienen boro, cloro, sodio y carbonatos, mismos que han sido extraídos de la zona donde se construye la terminal aérea”, refirió Hernández.
Otra denuncia del tipo penal, es la interpuesta ante PGR “por el abastecimiento de combustible extraído ilegalmente de los ductos de Pemex, es decir “huachicol”, con el que se cargan los camiones pesados y góndolas que transportan los materiales pétreos para el nuevo aeropuerto.
Dijo el diputado, que él mismo ha presentado tres denuncias penales “y el resto son de vecinos afectados por la terminal aérea”.
Contó igualmente “afectaciones de sitios arqueológicos, como el del cerro de Las Cuevas desde el que se obtiene material pero se destruye la arqueología que caracteriza a la zona y se perjudica fauna endémica, como el ajolote en las lagunas de Tepetlaoxtoc, al tiempo que se explotan minas en zona pública, como los terrenos de la Universidad Autónoma del Estado de México y su mina El Colorado”.