Para abordar el desempeño de las mujeres en distintos contextos de la historia, el Instituto Superior de Ciencias de la Educación del Estado de México (ISCEEM), presentó la conferencia “Mujeres rebeldes, pacíficas y soldaderas”, impartida por Alejandro Rodríguez Mayoral, Doctor en historia, politólogo y analista político.
Para esta actividad, el director del ISCEEM, Eduardo Blanco Rodríguez, dio la bienvenida y agradeció en nombre del gobernador Alfredo del Mazo Maza y del secretario de Educación, Gerardo Monroy Serrano, la presencia del experimentado panelista, autor del libro “La vida cotidiana entre los zapatistas 1910-1920”, a quien dijo que este tipo de actividades promueven y destacan el rol de las mujeres mexicanas en la historia.
Ante docentes e investigadores, así como público en general, el ponente mostró diversas fotografías que datan de 1914 y 1915, donde las mujeres mostraban su tristeza por vivir en condiciones infrahumanas, después de la revolución. En las gráficas presentadas se pudo apreciar que hay soldaderas en cuclillas, en el monte, o de ellas a pie al lado de sus hombres.
Explicó que en el movimiento revolucionario había tres grupos de mujeres: las que tomaron las armas, que fueron las rebeldes; las que apoyaron a sus hombres y familias proporcionando sustento, protección y cuidados, las soldaderas; y las que se mantuvieron al margen de la violencia, las pacíficas.
También dio lectura a varias cartas escritas en esa época, en las que las mujeres viudas solicitaban apoyo al General Zapata para el sustento de sus hijos, dando testimonio de la vida tan difícil que llevaron.
“Sobreviven registros que dan fe de que los zapatistas ayudaron a las viudas, entre ellas una carta de noviembre de 1915, donde Zapata ordena desde su cuartel al Pagador General del Ejército Libertador, destinar 50 mil pesos para gastos de jefes zapatistas muertos en campaña y ser destinados a sus viudas”, refirió.
El conferencista reconoció que, a través de esos relatos, se pueden apreciar las peticiones de justicia, de alimentos o para sobrellevar la vida.
“La experiencia zapatista nos muestra a todas estas mujeres mexicanas que lucharon, que la pasaron mal, en desamparo, vulnerabilidad, sufrieron mucho con sus familias, y la lección que nos dejan es que nunca se rindieron e hicieron todo para salir adelante, siempre con la cabeza en alto”, concluyó.
Alejandro Rodríguez Mayoral es miembro de la Cátedra Emiliano Zapata Salazar, coordinador de Educación y Cultura de la Fundación Emiliano Zapata y Herederos de la Revolución y miembro de Latin American Studies Association (LASA). Estudió su doctorado en la Universidad de Texas, y es catedrático de la Universidad de Colima. Ha colaborado en proyectos fílmicos sobre la Revolución Mexicana.