En la actualidad, no existe un control efectivo en cuanto a la cantidad y el confinamiento que se da a los desechos industriales sólidos tóxicos que generan las más de 300 industrias asentadas en el corredor Toluca-Lerma-Ocoyoacac, denunció la presidenta del Movimiento Ecologista del Estado de México, Luz María Gómez Ordóñez.
Cada empresa debe ser “socialmente responsable” y “amigable con el medio ambiente”, cuando se instala una industria la autorización es emitida por parte de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), instancia que hace supervisiones de manera permanente.
Los ayuntamientos no están obligados a recoger los desechos de las industrias, los empresarios deben contratar un servicio particular de recolección y en ese aspecto es donde se cometen omisiones que son dañinas para el medio ambiente, más aun cuando la capital del Estado de México no cuenta con un relleno sanitario, ni mucho menos se tiene registro de un lugar donde se realice un confinamiento especial de los desechos industriales tóxicos.
Gómez Ordóñez recordó que existen desechos industriales sólidos no tóxicos y los tóxicos o peligrosos.
En el caso de los primeros se refiere a todo el material que usan para el embalaje de sus productos, como podría ser el cartón, el papel y otro tipo de desechos que por su inocuidad no causan gran daño y pueden irse hasta a un tiradero a cielo abierto, como lo es el relleno sanitario.
Tratamiento
Sin embargo, en lo que respecta a los desechos industriales tóxicos, que son altamente contaminantes y que se refiere a los remanentes de los procesos productivos e incluyen materiales tóxicos.
De acuerdo con la Ley General del Equilibrio Ecológico y con el Código de la Biodiversidad, deben tener un confinamiento especial, no se pueden reducir, no se pueden quemar, deben ir a un confinamiento donde se van a enterrar y a proteger con plástico, en algunos casos se colocan hasta nueve capas de plásticos y se le colocan membranas.
Ese tipo de confinamientos para desechos industriales tóxicos tienen una vida útil de 30 a 40 años y de acuerdo con la normatividad se deben establecer en una zona donde no haya una conurbación urbana, donde el suelo sea impermeable, pero en el Valle de Toluca no se tiene conocimiento de la existencia de alguno.
“Hasta la fecha no sabemos dónde están depositando sus desechos tóxicos las más de 300 industrias del corredor Toluca-LermaOcoyoacac. En el Valle de Toluca no tenemos un solo confinamiento y esto es una situación peligrosa y es una cuestión de la Semarnat estar monitoreando y supervisando que se cumpla con la norma oficial”, indicó.
La ambientalista subrayó que es difícil cuantificar la cantidad de desechos tóxicos y no tóxicos que generan las industrias de la región, porque corresponden a diversos sectores, hay desde armadoras, manufactura, de la industria de alimentos, textil, químico, etc., que complica las estimaciones.