Cuautitlán Izcalli no sufre de sobrepoblación, sino de una población mal atendida por empresas desarrolladoras que por años dejaron inconclusos complejos habitacionales, sobre todo en drenaje, alumbrado, agua y por no haberlos entregado a la autoridad local, manifestó el alcalde, Víctor Estrada, con motivo del 44 aniversario del municipio 121, uno de los más jóvenes de la entidad.
“A lo largo de cuatro décadas, el proyecto original se fue transformando bajo distintas ideologías políticas, intereses económicos e incluso metropolitanos que fueron absorbiéndolo en una serie de problemáticas propias de lo que hoy se conoce como la Megalópolis que nos une con la Ciudad de México y con 58 municipios mexiquenses”, precisó.
Dijo que “la explosiva urbanización provocada por los sismos de 1985, la creación de grandes unidades habitacionales y colonias sobre terrenos impropios para ser habitados y el cambio climático, han puesto en predicamento la administración de recursos que hace 44 años se consideraban inagotables para un municipio autosustentable.
“No nos hemos salido de la mecánica con la que iniciamos, que era la reestructuración administrativa, organizacional, de reorganización financiera y su viabilidad en obra pública, seguridad, recursos materiales y humanos; ésto es de paciencia, nos entregaron una administración con rezago.
Yo estimo que en diez años se puede recuperar el proyecto de municipio modelo, el de ser el más moderno del país”, indicó Estrada.
Agregó que aquellas colonias que no han sido integradas debidamente al Atlas de Riesgo sí serán atendidas, pero que habían estado sin considerarse “porque o son irregulares o sus desarrolladores nunca las entregaron al ayuntamiento, como Lomas de Cuautitlán y La Piedad”.