Los pequeños comerciantes serán los más afectados por la estrategia del gobierno federal para controlar los precios ante la inflación, pues genera una competencia desleal, señaló Gilberto Sauza Martínez, presidente del Consejo de Cámaras y Asociaciones Empresariales del Estado de México (Concaem).
En el país y el Estado de México, recordó el líder empresarial, más del 90 por ciento de las unidades económicas son micronegocios y la nueva estrategia contempla sólo beneficios a 15 macro empresas, “dejando fuera a millones de pequeños empresarios y comerciantes”.
Tan sólo en la entidad mexiquense, existen un promedio de 767 mil 547 unidades económicas, que representan el ingreso para 3 millones 346 mil 381 personas y de los cuales, el 96.8 por ciento son pequeños y micro negocios, de acuerdo a datos del Censo Económico del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
En este marco, Sauza Martínez, reconoció que “la política de control de precios nunca ha sido una estrategia viable ni de control de inflación, ni de mejora en el acceso de bienes y servicios a la población”, sólo genera especulación y un encarecimiento de bienes en el mediano plazo.
Aunado a ello, apuntó, la calidad de los productos se ve comprometida y más al ser suspendida toda regulación en materia de importación y movilidad de alimentos dentro del país, que incluye los Servicios de Sanidad y Calidad y de la Comisión Federal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios.
“Es una situación delicada, toda vez que estamos hablando justo de temas alimentarios, en donde es indispensable el garantizar que los bienes que lleguen a la población se encuentren perfectamente revisados, que no puedan implicar un mayor riesgo a la salud, cuyas repercusiones sean graves”, comentó.
Exhortó al Gobierno de México a generar una verdadera estrategia que atienda el efecto en los suministros, para generar los bienes de la canasta básica, es decir, generar una propuesta eficiente en materia de costos de traslado, logística y energéticos.