Ante el grave deterioro de la Sierra de Guadalupe, grupos de ambientalistas hicieron un llamado a la sociedad civil para que se sumen al rescate del pulmón verde más importante del Valle de México.

Se trata de una cordillera boscosa de 5 mil 293 hectáreas, que se extienden a lo largo de los municipios de Coacalco, Tultitlán, Tlalnepantla y Ecatepec.

La reserva ecológica, afirmaron, enfrenta un grave estado de abandono y de urbanización.

Por lo anterior, grupos de ambientalistas de Coacalco, como el Grupo Ambientalista Sierra de Guadalupe, VereDeando y Fundación Bienestar para la Diversidad, entre otros, han convocado a la sociedad civil a unirse en esfuerzos de rescate y conservación.

La Sierra de Guadalupe, con sus barrancas y ecosistema diverso, es esencial para regular inundaciones, promover un clima favorable y albergar una rica biodiversidad. Se trata de la principal fábrica de agua y de oxígeno de la zona conurbada.

Sin embargo, su historia reciente ha sido de desatención y deterioro. Las barrancas, alguna vez prístinas, se han convertido en vertederos de basura y drenajes de aguas contaminadas, una situación agravada por la gestión ineficaz de los funcionarios responsables y la falta de conciencia ambiental.

Los ambientalistas, apuntaron que la iniciativa de rescate incluye trabajos de limpieza, reforestación y acciones jurídicas contra posibles invasiones ilegales. El objetivo es transformar estos espacios abandonados en microclimas y áreas de esparcimiento, mejorando así el entorno de una de las zonas más pobladas y urbanizadas del mundo.

Afirmaron que situación actual de la Sierra de Guadalupe, refleja un abandono gubernamental preocupante. Los esfuerzos de las organizaciones ambientales son un paso crucial hacia la reivindicación y protección de este espacio natural. Daniel Granados Marmolejo, representante del colectivo, resaltó la importancia de pasar de la foto y la política clientelista a acciones concretas y sustentables.

El ambientalista, apuntó que “la participación activa de la comunidad es fundamental para preservar y revitalizar esta reserva ecológica, un patrimonio natural que merece ser salvaguardado para las futuras generaciones”.