Maribel Cervantes Guerrero, secretaria de Seguridad Ciudadana, con sonrisa nostálgica recordó que de niña siempre quiso una Barbie y la “Comiditas”, que Santa Claus nunca le llevó, quizás porque en su casa eran cinco hijos a los que había que entregarles regalos, aunque siempre hubo algo para ellos.
Luego de mencionar que tuvo una infancia muy bonita, dijo que para esta navidad espera que pueda avanzar en la seguridad de los mexiquenses, por ello, le pide a Santa Claus, los Reyes Magos, sociedad y policías, le ayuden a recupera la seguridad en la entidad.
Desde la bancada perredista, su coordinador Juan Zepeda Hernández recuerda con ilusión los momentos, cuando niño, junto con sus hermanos, esperaban la llegada de los Reyes Magos. “De chavitos, nosotros pedíamos los juguetes que en ese tiempo estaban de moda, lo que veíamos en la tele, de repente los patines, la bicicleta, los trenecitos de batería, que eran muy populares, de esas que armabas los rieles”, recordó.
Relata Zepeda, que hacían las cartitas a los Reyes, pero sólo les traían una bolsita de colaciones, una pelota de hule y algún cochecito de lata o luchadores, como el Santo, que tienen una mano hacia arriba y otra hacia abajo, con lo que jugaban a las luchas o al futbol.
“El mejor año, fue cuando creo que tenía 10 u 11 años, me trajeron un patín del diablo, fue cuando me rayé, imagínate Neza, con calles de terracería, no había pavimento y me iba con mi patín a las tortillas y al mercado, entre pura terracería, tardaba más en ir y venir en el patín del diablo que caminando”, relató.
Por su parte, el diputado y coordinador de la bancada priista Cruz Juvenal Roa Sánchez, expresó proviene de una familia humilde, que se dedica a vender helados y paletas y de acuerdo a las posibilidades, tanto de Santa Claus como de los Reyes Magos, le cumplieron sus deseos.
“Lo más importante es que me dieron mi carrera, y eso me permite enfrentar mi vida y mi carrera que estudié en la Universidad Autónoma del Estado de México, me permite estar en estos cargos”, expresó.
La boxeadora profesional Ibeth “La Roca” Zamora sí encontró en sus recuerdos una petición que quedó pendiente por cumplirse, cuando tenía seis años de edad: “Quería un botiquín de médicos, porque de chiquita quería ser doctora, pero no llegó”. Pese a la decepción que sintió en el momento, con los años comprendió que a veces Santa Claus y los Reyes Magos no cuentan con los recursos para cumplir todo lo que se les pide. El diputado panista Raymundo Guzmán Corroviñas, expresó que no recuerda que los Reyes Magos no le hayan cumplido algún deseo, ya que era muy mesurado, al momento de realizar su carta.
“Le pedía a los Reyes Magos y más que a Santa al Niño Jesús”, expresó el legislador, quien señaló que el presente que más recuerda fue una bicicleta Vagabundo, con manubrio grande, que parecía motocicleta. Pedí la bicicleta por dos años y al segundo ya me la trajeron, estaba muy contento, ya que tenía un frenado especial, de los pedales hacia atrás y eso le daba mucho mejor agarre”, expresó el diputado, quien recuerda con mucho cariño haber recibido los presentes y con mucha ilusión.
Delfino Mora, comisario de la policía estatal con sede en Toluca, comentó que en su niñez siempre anheló una bicicleta, pero por falta de recursos nunca la tuvo, aunque si recordó que él pedía una cosa y le traían otra, por lo que pensaba que Santa Claus sí lo tomaba en cuenta.
Patricio González Suárez, presidente de la Asociación de Bares y Restaurantes del Estado de México (Asbar), su petición incumplida fue un camioncito de control remoto que encendía luces cuando funcionaba, atribuyendo esta desilusión a una falla en la logística en la adquisición de sus regalos, pues Santa ya no supo dónde comprarlo.
Gabriel Hauche, jugador de los Diablos Rojos del Toluca confesó que en su caso los pedidos eran “monótonos” y siempre estaban relacionados con el futbol, “entonces por un medio o por otro siempre me cumplieron, no tengo ningún reproche contra ninguno de ellos”.
Recordó en especial un regalo que anhelaba, cuando tenía unos 8 años, pidió unos botines de futbol de la marca que estaba de moda y que utilizaban la mayoría de jugadores de la Primera División. “Hicieron el esfuerzo y pudieron cumplir esa petición, y recuerdo la felicidad de tener los mismos zapatos que los jugadores profesionales”.
David Tapia Álvarez, presidente del Patronato Pro Centro Histórico de Toluca comentó que su anhelo era tener una grabadora amarilla, sin embargo, los Reyes Magos equivocaron la entrega y se la trajeron a su hermano.
El jugador de los Potros UAEM FC de la Liga de Ascenso, Alfonso Rippa tiene buenos recuerdos del desempeño de Santa Claus y los Reyes Magos, que siempre cumplieron, lo que atribuye a que “me educaron para pedir un regalito por Navidad, y hacía todo lo posible por portarme bien”. Recuerda con especial emoción cuando tenía seis años de edad y recibió de parte de Santa Claus un regalo especial: “Me trajo 12 pelotas, desde la más grande hasta la más chiquita, me dejó impactado y marcado, y los Reyes Magos le trajeron por lo general alguna playera o algo de ropa”, lo cual lo emocionaba menos, pero también o agradecía.
Rodrigo Pichardo, especialista en Ciencias Políticas, hizo una remembranza de su infancia y vislumbró en su pensamiento aquellas fiestas decembrinas en donde Santa Claus nunca llegó, sólo lo visitó el Niño Dios en Navidad y los tradicionales Reyes Magos el 6 de enero. El Niño Dios nunca llegó con juguetes, sino con ropa, calcetines y pijamas; los Reyes solían traerle juguetes que, en ocasiones, no se acercaban del todo a la petición de la carta, aunque él considera que era debido a que es el mayor de sus hermanos.
“Recuerdo, claramente, que yo pedí Caballeros del Zodiaco, pedí al Caballero de Sagitario o Pegaso o Fénix”, es decir, les dio tres opciones a los Reyes Magos, sin embargo, esa mañana del 6 de enero, levantó a sus hermanos, bajó ilusionado al árbol de Navidad y vio un bulto a lo lejos, se emocionó y pensó que eran los 12 caballeros del Zodiaco, aunque su mente le cuestionó por qué estaban guardados en ese bulto, tras intentar abrir el bulto, sin éxito, le dio la vuelta y vio la leyenda “costal para entrenar Karate y Box”.
La especialista en Recursos Humanos, Ana Paola Reyes, recordó que sólo en una ocasión los Reyes Magos no cumplieron sus deseos y fue debido al peligro que el juguete podría ocasionarle.”Pedí un set de Polly Pocket super mini, y nunca llegó por miedo a que me tragara las piecesitas, tuve la gran fortuna de tener un excelente Rey Mago, siempre hizo hasta lo imposible por traerme lo que pedía”, concluyó.
Claudia Hernández González, licenciada en Pedagogía, el que no le llegara lo que pedía se debió a que “hubo muchos niños que pidieron el mismo regalo y se les acabó a los Reyes Magos”, entre ellos la máquina para hacer raspados que nunca estuvo en su árbol de navidad, sin embargo, y a pesar de los años, para ella los Reyes Magos siguen teniendo más prioridad que Santa Claus, quien nunca le trajo nada.