Gustavo Arballo Luján, presidente nacional de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), precisó que las afectaciones que dejó el sismo de septiembre no perjudica el presupuesto para la creación de obras, gracias a las revisiones del presupuesto y las aportaciones especiales.
“Ninguna obra sufrirá recorte por esto. El presupuesto ya incluye un renglón como el Fonden, e igual para 2018, más el apoyo de la iniciativa privada, extranjera, asociaciones y organizaciones, tendremos lo suficiente, no en detrimento de las grandes obras que ya están en proceso”.
En entrevista, detalló que la reconstrucción de las zonas afectadas va a incrementar la labor del sector, toda vez que son alrededor de 48 mil millones de pesos los recursos que se estiman para este proceso, los cuales se estarán erogando en áreas de obra pública, como las escuelas, el patrimonio cultural y el sector salud, así como parte de este también será aplicado en las viviendas.
Asimismo, el líder empresarial señaló que la reconstrucción en las zonas devastadas tardará de tres a cuatro años, la cual se dividirá en tres etapas y la primera, la más fuerte, tendrá un lapso de un año en materia de obra pública, que es la de mayor urgencia. Consideró que una de las partes fundamentales para avanzar en esta reconstrucción tiene que ver con la necesidad de revisar cada una de las normas de edificación para descartar o asegurar si las afectaciones corresponden a este tipo de fenómenos, pues esto permitirá actuar bajo índices de seguridad necesarios, ya sea para reconstruir, derrumbar unas partes o demoler toda la estructura.