Ante la llegada del Tren Interurbano MéxicoToluca (TIMT), el Valle de Toluca ya perdió cuatro años para prepararse, por lo que urge la implementación de un plan que permita contar con una infraestructura urbana alineada a las nuevas necesidades, siguiendo planes de desarrollo orientados a mejorar el transporte público que ofrezca un servicio de conexión en torno a las cuatro estaciones, además de aportarle a convertir la avenida las Torres, en un “Corredor Urbano bajo en emisiones de carbono” ejemplo a nivel internacional.
En reunión con miembros de la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo del Valle de Toluca, Carlos Mendieta Zerón, director de Fundación Tláloc y Alfonso Iracheta Cenecorta, director general de Centro EURE, presentaron ponencias sobre la necesidad de preparar e Integrar al Valle de Toluca para aprovechar las bondades de esta obra, además de plantear los riesgos a los que se enfrenta.
Los especialistas en movilidad, señalaron que en el Valle de Toluca, es la zona donde se presenta una mayor dependencia en el uso del automóvil, ya que es la única de las cinco zonas metropolitanas más grandes del país que no tiene una alternativa de transporte público integrado, ni carriles confinados.
Por ello, dijeron, el proyecto del tren viene a propiciar una solución a esta problemática, pues plantea ser un medio de transporte amigable con el medio ambiente y veloz, mismo que a la par ofrece la opción de urbanización en torno a su trayecto, pero su generación tiene que implicar el trabajo colaborativo de múltiples sectores, entre ellos los comerciantes formales.
Alfonso Iracheta, precisó que históricamente la urbanización se ha encargado de afectar la biodiversidad, porque los proyectos se han caracterizado por gestarse sin una verdadera planeación basada en estudios técnicos.
Recordó que antes del tren interurbano, existió un proyecto que buscaba ofrecer una mejor movilidad hacia la zona metropolitana denominado, Tren Toluca-Naucalpan en 1970, sin embargo este no vio luz, por la implementación de políticas públicas que intentaban dar un ordenamiento para la zona de La Marquesa y el Valle de Toluca, que resultó en la construcción de más carreteras, que ahora son objeto de 500 mil viajes al día en automóvil y 20 mil en autobús hacia la capital del país.
Para esta segunda oportunidad, comentó que existen muchos temas que no están claros en torno al TIMT, como la elección del trazo para su trayectoria, la ubicación de las estaciones, la funcionalidad electromecánica y lo más preocupante, es que no hay información, pues este proyecto no aparece en los planes de desarrollo municipales y estatal.
Se hizo un llamado al gobierno, para concebir al proyecto del tren como un corredor de desarrollo, centrado en el transporte público para que cumpla su cometido, con visión de largo plazo, a través la creación de mesas de trabajo en cada municipio.