En el ámbito empresarial, existe un amplio reto en cuanto a la paridad sustantiva de género, sobre todo en cargos directivos, pues se estima que en el Estado de México, sólo un 30 por ciento está ocupado por mujeres.
Así lo señaló en referencia del Día Internacional de la Mujer, el director de la Unión Industrial del Estado de México (Unidem), Francisco Cuevas Dobarganes.
En el encuentro con más de 200 mujeres del Club Rotario Xalostoc, el dirigente empresarial enfatizó que hay cambios graduales en los espacios directivos y operativos que ocupan mujeres, pues hace 30 años era muy rara la ocupación en direcciones.
Incluso en el caso de empresas transnacionales, socias de Unidem, muchas de ellas de Suiza, Alemania, Suecia, Estados Unidos, ocupan cargos de nivel dirección y hasta en áreas de logística y seguridad industrial, que son puestos que tradicionalmente habían sido ocupados por hombres.
“Hace unos 25 o 30 años, menos del 4 por ciento de cargos directivos lo ocupaban mujeres, hoy es al menos un 30 por ciento y muchas empresas, llegan a preferir a las mujeres sobre los hombres en cargos directivos”, dijo el director de Unidem.
Reconoció que aún muchos patrones persisten con una visión machista, sin dar oportunidad a cargos directivos esto es debido a temas relacionados con la maternidad, porque lo ven como un obstáculo que ocasiona ausentismo, aunque en la gran mayoría de los casos, ya se es flexible con los distintos roles que se desempeñan y ofrecen muchas alternativas tales como el trabajo a distancia.
La brecha salarial, añadió, también se ha ido cerrando, porque en los puestos de nivel operativo prácticamente ganan lo mismo, y también ya aumentó la participación de la mujer en el sector químico y de fundición y en áreas de vigilancia con responsabilidades de dirección y supervisión, puestos donde los hombres tenían casi el monopolio; ya hasta se prefiere más a mujeres en áreas donde se maneja dinero, porque valoran más el trabajo y asumen menos riesgos.
Graciela Román, integrante del Club Rotario Xalostoc, estimó que 8 de cada 10 mujeres de la entidad ya son trabajadoras, emprendedoras o empresarias, cada vez más buscan superarse y ya no quieren ser empleadas sino empleadoras; ello se detonó tras la preparación que tuvieron durante la pandemia, al tomar cursos, talleres y estudios durante el encierro.