La costumbre de festejar a nuestros fieles difuntos durante los dos primeros días de noviembre, es una tradición que no muere; así, en Ecatepec de Morelos, Tlalnepantla de Baz y Coacalco de Berriozábal se alistan las autoridades municipales para recibir en total a casi un millón de personas en los diferentes panteones de esas ciudades.
El municipio de Ecatepec cuenta con 14 cementerios, dos de ellos particulares, en colonias y pueblos. Aquí, año con año llega aproximadamente medio millón de personas a rezar y a colocar ofrendas florales a sus difuntos. Incluso muchas familias pernoctan en las tumbas, mismas que arreglan, lavan y pintan.
Autoridades municipales de Vía Pública de Ecatepec informaron que, como en años anteriores, el primero y dos de noviembre se darán 500 permisos para la venta de flores, alimentos y demás productos de temporada afuera de los panteones.
Asimismo, se montará un dispositivo especial de seguridad en cada uno de los camposantos.
En tanto, en Tlalnepantla de Baz Joel Álvarez García, coordinador general de Protección Civil, dio a conocer que existen 16 panteones, entre ellos el más grande del país: Jardines del Recuerdo, en el cual se prevé la llegada de cerca de 200 mil visitantes.
Agregó que el área a su cargo desplegará 75 elementos entre bomberos y paramédicos, así como 28 unidades que estarán al pendiente de las rutas de evacuación y de cualquier inconveniente que pudiera poner en riesgo la integridad física de las personas.
Por su parte, en el municipio de Coacalco existen cinco panteones, de los cuales uno de ellos particular. En todos se otorgan cada año poco más de 100 permisos para vender en las inmediaciones.