Los 11 municipios del Estado de México considerados en la Alerta de Género han capacitado a sus agentes policiacos para actuar con perspectiva de género en casos de violencia contra las mujeres.
Policías de Cuautitlán Izcalli, Chalco, Chimalhuacán, Ecatepec, Ixtapaluca, Naucalpan, Nezahualcóyotl, Tlalnepantla, Toluca, Tultitlán y Valle de Chalco han llevado a cabo cursos de capacitación en coordinación con la Fiscalía General de Justicia del Estado de México, el Consejo Estatal de la Mujer y Bienestar Social y la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas para atender de forma correcta los casos de violencia de género.
Así, para salvaguardar los derechos de las víctimas y prevenir la comisión de delitos contra las mujeres, las y los agentes que integran estas agrupaciones siguen un protocolo que considera cinco puntos de acción.
El primero, Detección, sugiere ubicar posibles casos de violencia y zonas de riesgo, a través del contacto directo con la comunidad.
Le sigue Identificación, cuyo objetivo es saber si hay una posible víctima y/o si se encuentra en riesgo de violencia.
En el tercer punto del protocolo está la Intervención, que se da ante situaciones de crisis, para dar prioridad a la atención de mujeres en riesgo.
Posteriormente, viene la Atención, que significa canalizar a la víctima a las instancias correspondientes del orden municipal y estatal, con el fin de garantizar su bienestar.
Finalmente, el protocolo contiene Protección, con el fin de asegurar la integridad física de las víctimas.
Estos cuerpos policiacos cuentan con unidades de atención a víctimas de violencia familiar y de género a través de las cuales operan sus células de reacción inmediata, que atienden a mujeres en riesgo y actúan para no perder tiempo cuando se reportan desapariciones.
En la mayoría de los municipios, estos agentes están identificados con tonos rosas en sus uniformes y tienen vehículos membretados para que las mujeres en riesgo o sus familias puedan ubicarlos en caso de necesitarlos.
Tal es el caso de Ixtapaluca, donde 200 policías ya han recibido capacitación en materia de género, portan un brazalete rosa y patrullan junto con sus compañeros de Seguridad Pública para estar alerta en todos los sectores del municipio.
En Tultitlán, en atención a las recomendaciones del mecanismo de alerta, han integrado una agrupación de siete personas y prevén sumar el próximo año a 40 agentes más para llevar a cabo protocolos de actuación con perspectiva de género.
Tlalnepantla tiene ya 60 policías capacitados en la materia, quienes en el último año brindaron 215 apoyos a mujeres en situación de violencia, de las cuales, 142 decidieron iniciar carpetas de investigación y recibieron acompañamiento y asesoría jurídica.
En Valle de Chalco, con un total de 50 agentes especializados, se llevan a cabo rondines de vigilancia en los domicilios con medidas de protección y se realizan operativos en las calles y horarios con mayor afluencia de mujeres, para garantizar su seguridad.
En Naucalpan, un total de 24 agentes especializados participan en los operativos “Transporte Seguro”, de manera que mientras los varones son revisados por policías de Seguridad Pública, ellos entregan trípticos y ofrecen información para prevenir la Violencia de Género. A la fecha, esta célula ha atendido más de 2 mil 300 casos de violencia contra mujeres.
En Cuautitlán Izcalli, con un total de 40 agentes en sus células de atención a la Alerta se ha dado seguimiento a 965 casos de violencia familiar y de género.
En tanto, en Nezahualcóyotl, con un total de 12 agentes y con la colaboración del personal del Centro de Videovigilancia y el helicóptero de Seguridad Pública, Coyote I, se vigilan permanentemente 400 puntos de mayor riesgo en el municipio.
En Ecatepec, estas células cuentan con 18 agentes policiacos especializados y cada una opera con un psicólogo y un abogado, quienes apoyan de manera integral a las mujeres que sufren violencia.
Chimalhuacán tiene en total siete agentes especializados, que operan de manera coordinada con el resto de las fuerzas policiacas para garantizar la seguridad de las mujeres que solicitan apoyo por casos de violencia.